Cenar en telecabinas: otra idea para combatir el coronavirus

Una compañía de EEUU dedicada a reparar telecabinas las adapta para que los restaurantes ofrezcan una opción gastronómica segura al aire libre

Telecabina en Mountain Village, Colorado. Foto The Gondola Shop

Primero fueron los microinvernaderos, luego los iglús de plástico. Y ahora llega una nueva opción para disfrutar de la gastronomía sin temor a los contagios: las comidas y cenas en telecabinas de esquí.

Cada vez más restaurantes de EEUU están adoptando estos elementos de transporte para ofrecer una opción segura a sus clientes.

Las unidades permiten acomodar de cuatro a seis personas, y en su interior cuenta con una mesa, asientos más confortables que la incómoda estructura de plástico habitual y elementos de confort como calefacción, luces y en algunos casos, altavoces con conexión Bluetooth para que el comensal elija la música de su preferencia.

Detalle de la telecabina adaptada para restaurantes. Foto The Gondola Shop

Ideal ante el crudo invierno

Uno de los locales que fueron pioneros en usar esta opción es la cervecería Mountain Tap Brewery, en Steamboat Springs, Colorado.

Según describe Food & Wine, el año pasado sus propietarios veían con preocupación que el invierno se acercaba y las medidas de restricción seguían firmes.

The Gondola Shop, compañía dedicada a reparar telecabinas, ofreció sus servicios a restaurantes que buscaban una opción segura frente a la expansión de la covid-19

Colorado es famoso por sus centros de esquí como Aspen, pero el glamour de los deportes de nieve se contrapone con unas temperaturas invernales que desisten a cualquier valiente de tomar siquiera una copa en el exterior.

Tras contactar con la compañía The Gondola Shop, instalaron tres cabinas que pertenecían a un complejo de esquí de Vermont para dar una nueva alternativa a sus clientes. Y ha sido un éxito.

Telecabina en Mountain Tap Brewery.

Dedicada a reparar telecabinas

The Gondola Shop es una pequeña empresa fundada hace 22 años por Dominique Bastien en el pueblo de Fruita, también en Colorado.

La idea original era dar un servicio a las estaciones de esquí del estado, para mantener las instalaciones y mamparas exteriores de las telecabinas, que al ser de plexiglás, se suelen rayar con facilidad y presentan una estética de suciedad poco agradable.

En aras de expandir su servicio hace tres años Bastien compró 55 telecabinas en desuso al centro de esquí Killington de Vermont, y meses más tarde adquirió otras 95 unidades al resort Steamboat de Colorado.

En un principio la ejecutiva pensó tenerlas como materia prima de repuestos o reconvertirlas en saunas o casetas para mascotas.

Las telecabinas tiene capacidad de 4 a 6 personas. Foto Rocky River Wine Bar

El nuevo rumbo

Pero llegó la pandemia y los encargos de los centros de esquí cayeron en picado.

La pérdida de pedidos en las pistas se equilibró con la llegada inesperada de nuevos clientes: los restaurantes.

El primer llamado vino de la ciudad de Mountain Village, en Telluride (Colorado), que encargaron cinco cabinas para compartir entre 12 restaurantes del pueblo. Al poco tiempo, el pedido creció a 25 unidades.

Así como los citados locales de su estado, también han vendido telecabinas adaptadas como micro-salones a restaurantes de Cleveland, Washington, St.Louis, San Francisco, Utah y Sun Valley (Idaho).

Telecabina adaptada para bodas. Foto The Gondola Shop

Cuánto cuesta una telecabina

La opción más económica es reacondicionar el interior de la telecabina y adosarle una mesa, opción que cuesta casi 4.000 euros.

Las telecabinas adaptadas para restaurantes se venden desde 4.000 a 16.500 euros

Pero para tener una telecabina más presentable, el personal de The Gondola Shop la desarma íntegramente, la pinta y la reconstruye con todas las comodidades necesarias para ser instalada en el jardín de un restaurante.

Esta alternativa cuesta entre 12.300 y 16.500 euros por unidad. Pero si resulta muy caro, también hay telecabinas en alquiler desde 410 euros mensuales.

En ocasiones, las situaciones de crisis pueden derivar en buenos negocios.

a.
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