Los hoteles de BCN impulsan un lobby contra los alquileres ilegales

El Gremio de Hoteles se reúne con las asociaciones de Montreal, París y Nueva York para presionar contra el alquiler ilegal de pisos turísticos

La expansión de los pisos turísticos, sobre todo de los ilegales, alerta a las asociaciones hoteleras de las mecas turísticas del mundo, que impulsan una plataforma para combatir a los alquileres que no están autorizados.

El Gremio de Hoteles de Barcelona impulsa un grupo internacional para analizar este fenómeno y armar una estrategia conjunta. En la iniciativa también participan la asociación hotelera de Nueva York, las patronales del sector de París (como AHTOP y GNI-Synhorcat) y la asociación de Montreal.

La primera reunión se realizará el 18 y 19 de junio en Nueva York, y al encuentro también concurrirán las representaciones de Buenos Aires, Tokio y Londres.

Las asociaciones hoteleras pedirán mano firme a las autoridades contra los pisos turísticos ilegales y las plataformas que los promocionan

En esta naciente plataforma intercambiarán experiencias sobre cómo cada ciudad combate a los pisos turísticos ilegales, y también crearán un grupo para reclamar a las autoridades que pongan mano firme para erradicar «el fraude y el descontrol en el alojamiento turístico».

Apuntan contra las plataformas de alquileres

La intención de esta nueva asociación de hoteles no es apuntar solo a los alojamientos, sino también “a las plataformas online que las comercializan”.

En Barcelona, el Gremio ha reclamando varias veces al Ayuntamiento que frene la publicidad de alojamientos que no están reglados, lo que se reflejó en las presiones del consistorio a Airbnb y a otras tecnológicas para que los borren de sus catálogos.

“Descontrol en Barcelona”

Para la patronal hotelera de Barcelona el alojamiento turístico ilegal es un fenómeno global que está encubierto bajo «la mal llamada economía colaborativa» y lamenta que tenga una alta incidencia en Barcelona, donde se ha desarrollado de forma “totalmente descontrolada”, dijo el director general Manel Casals.

Como en otras ocasiones, desde el Gremio se afirma que la expansión de los pisos ilegales es la máxima preocupación del sector, ya que pone en peligro la calidad y la excelencia que han definido la apuesta de Barcelona: «Es un negocio que perjudica gravemente a la sociedad en general y a su estado del bienestar», señaló el directivo.

Entre los perjuicios que ocasionan estos pisos ilegales, Casals destacó que los más graves son el fraude fiscal, el descontrol de los huéspedes y las molestias al vecindario. Además puntualizó que su expansión atenta contra el trabajo realizado desde las instituciones para preservar la calidad de la oferta turística.

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