Monet y Boudin, discípulo y maestro, dialogan en el Thyssen

Hasta el próximo 30 de septiembre, el Museo Thyssen de Madrid acoge una exposición monográfica que indaga en los orígenes del movimiento impresionista

El museo madrileño acoge hasta el próximo 30 de septiembre Monet/Boudin, la primera exposición monográfica que permite descubrir a través de sus obras la relación entre el pintor impresionista Claude Monet y su maestro Eugène Boudin, representante destacado de la pintura al aire libre francesa de mediados del siglo XIX.

Monet/Boudin, o de cómo el discípulo superó a su maestro, persigue, mediante la presentación conjunta de sus obras, arrojar luz sobre el periodo de aprendizaje de Monet, quien llegó a reconocer en 1911 a Georges Jean-Aubry, biógrafo de Boudin, “Si me he dedicado a la pintura, se lo debo a Eugène Boudin”.

Además, la muestra explora también el conjunto de las carreras de ambos pintores Claude Monet (París, 1840 – Giverny, 1926) y Eugène Boudin (Honfleur, 1824 – Deauville, 1898), y los orígenes mismos del impresionismo.

Un centenar de obras

Comisariada por Juan Ángel López-Manzanares, conservador del Museo Thyssen, la exposición reúne un total de 103 obras de ambos pintores, incluyendo préstamos de museos e instituciones como el Musée d’Orsay de París, la National Gallery de Londres, el Metropolitan de Nueva York o el Marunuma Art Park de Japón, así como de colecciones privadas.

Monet/Boudin, o de cómo el discípulo superó a su maestro, explora el conjunto de las carreras de ambos artistas

Entre sus intereses artísticos comunes, la exposición enfatiza su mutua atracción por la iconografía de la vida moderna –plasmada en escenas de veraneantes en la playa de Trouville-, por los efectos cambiantes de la luz –que protagonizaron la mayor parte de los pasteles y óleos de ambos pintores– y, finalmente, por la naturaleza semisalvaje de los acantilados de las costas de Bretaña y Normandía.

Encuentros y desencuentros

Si bien ambos pintores dejaron atrás las exaltadas composiciones románticas iniciales y evolucionaron hacia un naturalismo preocupado por los efectos atmosféricos, tomaron caminos diferentes y, mientras Boudin continuó con las enseñanzas de los paisajistas de la generación de 1830, Monet lideró la nueva generación impresionista.

Una corriente que abrió paso a una concepción moderna del paisaje en la que la impresión retiniana de anteponía a la experiencia conocida del mundo.

La muestra contrapone la obra y evolución de maestro y discípulo
La muestra contrapone la obra y evolución de maestro y discípulo

Toda la información de horarios y venta de entradas de la exposición, que cuenta con el mecenazgo de Japan Tobacco International, puede consultarse en el portal del museo Thyssen.

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