Las mejores playas de España a las que llegar en AVE (y en Ouigo, Iryo y Avlo)

De la playa de El Palo en Málaga a San Juan en Alicante, pasando por La Patacona en Valencia y Cala Fonda en Tarragona, estos son los mejores arenales del Mediterráneo a los que podemos llegar cómodamente en trenes de alta velocidad

La Caleta, Cádiz.

Las de Cádiz son algunas de las playas accesibles en alta velocidad. Foto: Turismo de Andalucía.

Con más de 4.000 kilómetros, superados con la inauguración de la conexión Madrid-Murcia en 2022, la red española de alta velocidad es la segunda más extensa del mundo, solo por detrás de la china, y número uno indiscutible en Europa.

Además, desde noviembre pasado, España cuenta con tres operadores distintos: Renfe, Oiugo e Iryo, lo que multiplica la oferta disponible para llegar a muchos puntos del país, con precios a la baja gracias a los modelos de bajo coste de las nuevas empresas, replicado también por Renfe con su marca Avlo.

Así, y pese a flagrantes puntos negros que, como Extremadura, siguen sin conexión por alta velocidad, lo cierto es que el tren nos permite llegar a muchos más destinos, entre ellos de costa, de forma cómoda y rápida, sin tener que conducir y, especialmente, evitando los temidos atascos de las ‘operaciones salida’ del verano.

Con sus largos arenales y calas escondidas, chiringuitos donde exprimir los días, sesiones de snorkel, clases de yoga al atardecer o beach clubs donde disfrutar de los atardeceres con un cóctel en la mano, estas son las mejores playas de Málaga, Cádiz, Alicante, Valencia, Castellón, Tarragona o Barcelona que no solo están más cerca, sino también de forma más económica gracias a los trenes de alta velocidad.

Playa de la Malagueta
Playa de la Malagueta. Foto Turismo de Andalucía.

Playas de Málaga en alta velocidad

Empezamos el recorrido playero en alta velocidad en Málaga, una de las ciudades más vibrantes e interesantes del momento que, además de cultura, tradición, modernidad y un puñado de estupendos museos que visitar, cuenta con las tan ansiadas playas.

Solo 2 horas y 45 minutos separan las estaciones de Atocha en Madrid y María Zambrano en Málaga o, lo que es lo mismo, en solo tres horas podemos estar ya disfrutando de sus arenales urbanos, ya sea para un refrescante baño o para un homenaje con sus deliciosos espetos de sardina, seña de identidad de su litoral. Si hay algo que no falta son los restaurantes y los chiringuitos en los paseos marítimos que las conectan.

En total, la ciudad cuenta con 14 kilómetros de playas repartidos en 16 arenales, entre los que podemos decantarnos por las más urbanas y concurridas como La Malagueta, Pedregalejo, La Misericordia, El Palo o San Andrés o bien las más retiradas de Guadalmar –con zona nudista-, los Baños del Carmen o el Peñón del Cuervo.

Actualmente existen servicios de trenes de alta velocidad Madrid-Málaga operados por Renfe (AVE y Avlo) e Iryo. Ouigo por su parte ha retrasado el inicio de sus operaciones en esta conexión hasta el segundo semestre de 2024.

Espetos en la Playa del Dedo, Málaga. Foto: Turismo de Andalucía.

Cádiz

Aunque hay una opción en Renfe que combina un tren AVE y otro de Media Distancia, la forma más rápida de llegar a la ‘tacita de plata’ de plata es el Alvia, que recorren los 487 km kilómetros que separan Madrid y Cádiz en 4 horas y 31 minutos.

Una vez en la ciudad se puede disfrutar de sus cuatro playas urbanas, todas ellas con bandera azul este 2023, que suman un total de 7,2 km.

Son La Caleta, Santa María del Mar, pequeña y cerrada por espigones, La Victoria, la mayor en extensión, con una longitud de 2,5 km que abarca prácticamente toda la zona costera de Extramuros, y La Cortadura, la más salvaje, con un sistema dunar que la protege.

Playa de la Caleta, Cádiz.
La Caleta, Cádiz. Foto: Turismo de Andalucía.

Valencia

Bastante más cerca de Madrid están las playas de Valencia. El tren de alta velocidad más rápido hace el trayecto Madrid-Valencia en 1 hora y 40 minutos. Con La Malvarrosa, El Saler o La Patacona a tiro de piedra del centro de la ciudad, el resultado son más de tres kilómetros y medio de puro disfrute náutico a menos de 2 horas de Madrid.

Un viaje, además, disponible en AVE, Avlo, Ouigo e Iryo.

En sus aguas podrás hacer un bautismo de paddle surf y recibir clases particulares de windsurf o vela, dar un paseo en catamarán o moto de agua, pero también recorrerlas en banana boat o fly boat.

De vuelta a tierra firme, encarga un buen arroz a pie de la playa urbana en La Malvarrosa para luego continuar la tarde y enlazar con la noche en alguno de sus chiringuitos o clubs de playa.

Paseo Maritimo de La Patacona. Foto: VisitValencia.

Alicante

2 horas y media tarda el AVE que conecta Madrid y Alicante, una ciudad que cuenta con nada menos que ocho arenales, algunos de ellas situadas entre las mejores playas del Mediterráneo y, por supuesto, año tras año reconocidas con el sello de calidad europeo de las Banderas Azules.

Playa de San Juan, calas del Cabo de Huerta, playa de la Almadraba, playa de la Albufereta, playa del Postiguet, playa de Saladares-Urbanova, la Isla de Tabarca y la playa de Aguamarga, adaptada para perros, son sus mayores tesoros, especialmente en verano.

Playa del Postiguet, Alicante
Playa del Postiguet. Foto: Turismo Comunidad Valenciana.

Si hay que escoger, nos quedamos con la Isla de Tabarca, conectada con el puerto de la ciudad por una línea regular de barcos y con un núcleo urbano declarado Conjunto Histórico Artístico y Bien de Interés Cultural. Te enamorará la excelente calidad de sus aguas y la biodiversidad de su fauna y flora por la que ha sido declarada Reserva Marina del Mediterráneo.

Elche

En poco más de dos horas (2 horas y 8 minutos exactamente) llegamos también a Elche vía AVE. La ciudad, bien conocida por su famosa Dama, cuenta con 9 km de playas enmarcadas por el azul intenso del mar y el dorado deslumbrante de sus dunas.

Isla de Tabarca. Foto: Orsi Oletics Herczog | Pixabay.

Destacan el arenal de El Altet, de dos kilómetros y uno de los escasos ejemplos de funcionamiento natural dunar en España, la playa de Arenales del Sol, el Carabassí, entre dunas y pinares, La Marina y Les Pesqueres-El Rebollo. Además, es otro buen lugar desde el que acceder a la Isla de Tabarca.

La ciudad de Elche cuenta con 9 km de layas enmarcadas por el azul intenso del mar y el dorado deslumbrante de sus dunas

Castellón

Completamos el recorrido por la Comunidad Valenciana en las playas de Castellón, separadas de Madrid en 2 horas y 55 minutos en AVE. Sin salir de la ciudad encontramos también playas. En concreto, tres arenales con una extensión aproximada de 4 km sobre el litoral mediterráneo.

La calidad de sus aguas, sus buenas instalaciones y servicios y su cercanía con la zona centro de la ciudad las convierten en paraísos al alcance de cualquiera. Dos de ellas, las playas del Pinar y Gurugú cuentan además con el distintivo de la Bandera Azul.

Durante el verano, Castellón organiza precisamente en torno a las playas una completa agenda de actividades, que van desde los ciclos de novela histórica y cuentacuentos a las visitas teatralizadas o las clases de yoga y taichí en la playa del Pinar, que se podrán realizar con los pies literalmente metidos en el agua.

Playa del Gurugú, en Castelló de la Plana
Playa Gurugú en Castelló de la Plana. Foto: Archivo Turismo Prov. de Castellón.

El SOM Festival, con conciertos en el distrito costero del Grau en julio y agosto, el IX Festival de Yoga y el cine de verano en la playa del Pinar completan la oferta.

Playas de Tarragona

Seguimos subiendo por el Mediterráneo hasta Tarragona (2 horas y 28 minutos en AVE desde Madrid, con rutas también en Avlo, Ouigo e Iryo). Fundada en época romana por los Escipiones, cuenta con un conjunto arqueológico, Tarraco, declarado patrimonio mundial por la Unesco.

Además de la Tarragona romana, que integran nada menos que 14 monumentos, la ciudad ofrece también apetecibles playas urbanas en 15 km de costa. Caracterizadas por la arena muy fina y de color dorado, que da nombre a la Costa Daurada (dorada), ostenta este año 4 banderas azules para las playas de L’Arrabassada, La Móra, Savinosa y Tamarit.

Cala Fonda o Waikiki, Tarragona
Cala Fonda o Waikiki. Foto: Wikimedia Commons.

Playa del Miracle/Comandancia, Los Capellans, Playa Larga, Playa de l’Arboçar, Playa de Becs y Cala Jovera completan una oferta playera de 10.

Mejores playas de Barcelona

Finalizamos este viaje de playa en playa por el Mediterráneo en Barcelona (2 horas y 30 minutos en AVE, también disponible en Avlo, Iryo y Ouigo), que ofrece casi 5 km de arenas finas y doradas y aguas poco profundas en un total de 11 playas. Fácilmente accesibles en transporte público o bicicleta, con restaurantes y chiringuitos para todos los gustos, son también perfectas para personas con movilidad reducida, ya que además cuentan con servicio de asistencia para el baño en verano.

Barcelona cuenta con un total de 5 km de playas de arenas finas y doradas distribuidos en 11 arenales

Destaca, por supuesto, La Barceloneta, sin duda la más popular y concurrida, con 422 metros que van del espigón del Gas a la playa de Sant Miquel y que, además de chiringuitos para todos los gustos, ofrece pistas de vóley, mesas de pimpón, biblio-playa o áreas de juegos infantiles.

Playa de la Barceloneta
La Barceloneta. Foto: Alessio Rinella | Unsplash.

Además, la playa de Sant Sebastià, la ubicada más al sur y la preferida por los deportistas, la playa de Sant Miquel, la playa del Somorrostro, Nova Icària, la playa del Bogatell, la playa de la Mar Bella (preferida por los jóvenes), la playa de Llevant (de las más recientes, creada en 2006) o la Playa del Fórum integran la oferta.

Playas de A Coruña

En AVE y tren Avant (3 horas 38 minutos) o directamente en Alvia (3 horas 52 minutos) se puede llegar de Madrid a las playas gallegas, concretamente las de A Coruña.

Una ciudad que es Atlántico puro y que además de al buen comer en sus mejores bares, tascas y restaurantes, invita a disfrutar de la Ciudad Vieja, paseos hasta la Torre de Hércules y, por supuesto, del mar.

En sus más de dos kilómetros de costa se suceden hasta seis playas urbanas, todas con Bandera Azul, y alguna que otra calita ideal para un chapuzón. Son las

Playa de Orzán, A Coruña.
Playa de Orzán. Foto: Turismo de Galicia.

En el centro de la ciudad, las playas de Riazor, Orzán y Matadero se funden formando una concha abierta al océano.

Más escondida, siguiendo el Paseo Marítimo, se encuentra a los pies de la Torre de Hércules la playa de As Lapas, con vistas maravillosas vistas a un monumento milenario y que es Patrimonio de la Humandiad por la UNESCO.

Después llega la playa de San Amaro, ubicada en el barrio de Adormideras y, ya en dirección salida de la ciudad, en Os Castros, la playa de Oza en la que disfrutar de vistas a la ría de O Burgo con Santa Cristina en frente.

Santander

De momento accesible en tren Alvia de Renfe (4 horas 15 minutos) como ruta más rápida, Santander es un apetecible destino veraniego, especialmente para quienes buscan huir de la masificación característica de otras zonas costeras y, más importante si cabe, de las altas temperaturas.

Playa Mataleñas, Santander
Playa de Mataleñas Santander. Foto: Pedro Puente Hoyos | EFE.

Pionera con los ‘baños de ola’ de eso que luego sería el turismo playero, la ciudad cuenta con más de una docena de playas de arena fina y dorada con paisajes que entremezclan mar y montañas y todos los servicios necesarios -algunas incluso con biblioteca o ludoteca- para pasar un día de relax junto a la orilla.

Entre las más famosas, las playas de Los Peligros, La Magdalena, Bikini -famosa porque aquí se vio por primera vez esta prenda para el baño-, El Camello, La Concha, Primera y Segunda de El Sardinero, Los Molinucos, Mataleñas, El Bocal, Rosamunda, La Maruca y Virgen del Mar.

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