Cómo viajar por toda Austria por solo 3 euros (mientras luchas contra el cambio climático)

El billete Klimaticket impulsado por Austria permite usar cualquier medio de transporte público, sea urbano o de larga distancia, a un precio increíble

ÖBB Nightjet . Foto: Harald Eisenberger | ÖBB Personenverkehr AG.

Metro, tren, tranvía o autobús. Para moverse cómodamente por Viena o para atravesar los Alpes rumo a Innsbruck, para visitar los mercadillos de Adviento de Salzburgo o descubrir los sabores de Graz. El nuevo billete Klimaticket permite viajar por toda Austria y en cualquier medio de transporte por un precio increíble: solo 3 euros al día.

Para residentes y visitantes -aunque no se puede usar en trenes turísticos-, este billete climático es una realidad en Austria, donde funciona desde el 26 de octubre. Y promete iniciar toda una revolución verde.

El billete climático

Klimaticket Ö es el nombre de este billete que puede comprarse por un día (3 euros), o bien en sus versiones semanal (21 euros) o anual (1.095 euros) y que ofrece además descuentos para niños, mayores y familias.

Puede usarse para todos los transportes públicos de los nueve estados federales de Austria, tanto urbanos como regionales, interregionales y nacionales, lo que facilita y simplifica la movilidad y, sobre todo, abarata los desplazamientos.

Un tren de ÖBB rumbo al Tirol. Foto: Tirol Werbung.

Y es, según afirman sus responsables, “mucho más que un billete para todos los transportes”. También es “el billete con el que pretendemos alcanzar juntos los objetivos climáticos de París” explican convencidos de que el transporte público es “la alternativa ecológica al transporte individual motorizado”.

El billete puede comprarse por un día (3 euros), una semana (21 euros) o todo un año (1.095 euros)

O, lo que es lo mismo, que cada vez más personas dejen aparcado el coche y opten por formas de transporte más respetuosas con el clima.

Por el momento, Austria es ya el segundo país donde más se viaja en tren de Europa, solo por detrás de Suiza. La combinación de servicios de calidad y puntualidad y un sistema de precios atractivos lo convierten en el preferido de muchos para sus viajes diarios, tanto por trabajo como por placer.

Pese a todo, según cifras oficiales del gobierno, solo el 16% de los viajes en 2018 se realizaron en transporte público.

Billete a un mundo más sostenible

De este modo, con el nuevo billete climático y asequible se espera animar a extender su uso. Más de 75.000 austriacos habían comprado este billete de forma anticipada (la web llegó incluso a colapsar las horas previas de su puesta en marcha), una respuesta muy positiva. La fecha en que pudieron estrenarlo no fue elegida al azar: el 26 de octubre es la fiesta nacional de Austria.

El billete es válido para todos los transportes. Foto. Turismo de Austria.

También es una victoria del Partido Verde del país y la ministra Leonore Gewessler, cuyas responsabilidades incluyen la acción climática, el medio ambiente, la energía, la movilidad, la innovación y la tecnología en el actual gobierno de coalición.

El Klimaticket fue un requisito exigido por su partido para entrar en el gobierno de los conservadores ÖVP, que se acompaña de una estrategia de modernización y expansión de la infraestructura de transportes, especialmente local y regional, pero también de larga distancia, y tanto en líneas como en estaciones.

Por ejemplo, se duplican las conexiones de The Westbahn entre Salzburgo y Viena, mientras ÖBB, la compañía de ferrocarriles estatales está ampliando su oferta, especialmente con trenes nocturnos.

El precio del billete anual es tres veces inferior a su equivalente en Suiza o Países Bajos

Precio por debajo del coste

El precio, dicen los expertos, no cubre los costes. Como ejemplo, otros países europeos que también ofrecen este tipo de billetes anuales válidos para transportes combinados los venden por precios que pueden triplicar el del Klimaticket austriaco, como en caso de la tarjeta de viaje General Abonnment (GA) de Suiza, que cuesta 3.860 francos suizos (3.624 euros), o el equivalente en Países Bajos (3.066 euros al año).

Se espera que el Klimaticket aumente los trayectos en transporte público. Foto: Harald Eisenberger | ÖBB Personenverkehr AG.

En el caso de Austria, es el estado quien subsidia el billete climático (con entre 200 y 300 millones de euros al año, según las estimaciones).

A cambio, apuntan, se ahorrará en atascos, emisiones de CO2 y contaminación.

Viajes nocturnos y al extranjero

Respecto a los viajes nocturnos, que en países como Austria están viviendo un nuevo auge, el Klimaticket Ö es válido en la clase de confort básica, por lo que si se viaja en vagones con asientos Nightjet, será necesario pagar un suplemento (6 euros).

Para vagones dormitorio y literas, la empresa de transporte cobrará una tarifa adicional.

Respecto a los viajes con destino a otros países, el billete climático solo cubre los trayectos en Austria, por lo que sería válido hasta la frontera nacional. Sería pues necesario comprar un billete para el trayecto que discurra en territorio extranjero.

a.
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