Diez secretos de Borgoña para descubrir en bicicleta

Viñedos, castillos, abadías, pueblos, valles y fortalezas. La región de Borgoña se conoce de otra forma si estos tesoros se conoce por medio de la bicicleta

En el centro de Francia los castillos, catedrales y pueblos de Borgoña son testigos de los siglos en que esta región ostentó un poder que eclipsaba a la corona francesa. Su territorio plagado de viñedos de una calidad sin igual es cruzado por una red de senderos, más de 1.700 kilómetros que se dividen y subdividen como si fuera un racimo de uvas.

Los tours en bicicleta se realizan por etapas, según la destreza física de cada uno y de si piensa atravesar los paisajes en un rodado eléctrico o mecánico.

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Algunos recorridos se centran en conocer las variedades vitivinícolas, otros exploran los encantos de los pueblos y están los que bordean los canales de regadío. Estos son algunos de los atractivos que se pueden encontrar en el camino.

A través de los viñedos

Los pueblos de Pommard, Volnay, Meursault, Puligny-Montrachet y Santenay son los más buscados por los amantes del turismo enológico. Todos están rodeados de chateaux productores de excelentes vinos, que ofrecen visitas guiadas y degustaciones.

viñedos

Todas las rutas ciclísticas atraviesan los viñedos de Borgoña. Foto: France Veloturismo

La región de Côte d’Or se divide en las secciones de Côte de Nuits y Côte de Beaune. En la primera se produce vino de pinot noir y otros tintos, mientras que la segunda predominan los blancos, sobre todo chardonnay.

Borgoña es productora de algunos de los mejores vinos del mundo. Muchos son elaborados por pequeñas bodegas donde sus propietarios están encantados de realizar visitas guiadas

En algunas bodegas cabe consultar y reservar desde la oficina local de turismo para las visitas, mientras que hay otras donde uno puede aparecer en cualquier momento que el propietario estará encantado de acompañar en un paseo por los viñedos.

La belleza de Beaune

Beaune es una ciudad pequeña, de unos 22.000 habitantes. Rodeada de una muralla que recuerda el fragor de guerras y asedios, su pequeño centro abunda en comercios de venta de vinos, quesos y otros productos delicatessen.

Beaune

El pintoresco pueblo de Beaune. Foto: Beaune France

El día ideal para visitar es el sábado, cuando los granjeros y bodegueros despliegan sus paradas en el mercado local, y de paso, es una buena oportunidad para llevar provisiones para la travesía.

La perla medieval de Dijon

Los tours ciclistas suelen tener a Dijon como punto de partida y llegada. Vale la pena pasar al menos un día para conocer su rico pasado medieval, con un despliegue de edificios que presentan estilos como el capeto, el gótico y el renacentista; con los característicos tejados de tejas de colores verde, amarillo y terracota que forman trazados geométricos.

Dijon Foto Dmitry Vetrov Flickr

Despliegue de estilos en Dijon. Foto: Dmitry Vetrov-Flickr

La catedral de San Beningno, así como las iglesias de Notre-Dame y Saint-Michel presentan un abanico de estilos, que compiten con el despliegue de Palacio de Justicia y el Palacio de los duques de Borgoña.

Paseo por los canales

La gran mayoría de caminos para bicicletas transitan por caminos donde está prohibido el tránsito de vehículos, o a lo sumo, se solapa con tranquilas carreteras secundarias.

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Muchos de estos trayectos corren paralelos a canales de regadío para los viñedos. Uno de los recomendados es el Canal de Borgoña, que desfila por 240 km desde Migennes a Dijon, y desde la capital de la región a St-Jean-de-Losne.

Canal de borgoña foto Level Voyageur

Viaje a lo largo del Canal de Borgoña. Foto: Level Voyageur

El camino transita por campos amarillos de plantas oleaginosas, verdes de sembradíos y rojos de amapolas, sazonado con pueblos, iglesias rurales y castillos en diferente grado de conservación.

Ruinas romanas

Autun podrá ser uno de tantos pueblos borgoñones, pero es un imán turístico por sus ruinas romanas, que datan del siglo I y que permanecen en excelente estado, como el Teatro Romano, la Puerta de Arroux y el Templo de Jano.

Teatro romano Autun Foto Didi Travel

Teatro romano en Autun. Foto: Didi Travel

No todo es pasado medieval: en Autun las ruinas romanas son una atracción de primer nivel

También cuenta con una interesante iglesia del siglo XII, uno de los mejores ejemplos de arte románico en el país.

Las colinas de Morvan

A unos 85 km al oeste de Dijon se encuentra el Parque Regional de Morvan, una zona de colinas tapizadas de bosques cruzada por arroyos y con varios lagos que se descubren tras transitar por sus senderos.

Morvan

Los colores del Parque Regional de Morvan. 

Zona protegida desde 1970, sus 283.000 hectáreas cuidan una valiosa flora y fauna autóctona, además del patrimonio de sus pueblos y sus elaboradas artesanías.

El parque integra un macizo montañoso, buscado por los amantes del ciclismo todo terreno. Uno de los circuitos más transitados es la Gran Travesía de Morvan, que serpentea por 330 km a lo largo de estos valles.

La abadía de Vézelay

Esta abadía, también conocida como la basílica de Sainte-Madeleine, es uno de los puntos históricos más visitados de Borgoña.

Abadia de Vezelay Foto Wikipedia

Abadia de Vezelay. Foto Wikipedia

Si se llega en otoño en días de neblina el lugar tiene un aire místico, con sus torres emergiendo entre las nubes bajas.

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Se trata del edificio románico más grande de Francia, punto clave de peregrinaciones y uno de los puntos de partida de las rutas a Santiago de Compostela.

La villa de Châteauneuf-en-Auxois

Entre Dijon y Autun se encuentra el pueblo amurallado de Châteauneuf-en-Auxois, al pie de la fortaleza de los duques de Borgoña.

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La villa fortificada de Châteauneuf-en-Auxois. Foto: All free photos

De ser un torreón la estructura fue creciendo y murallas adentro creció un pintoresco pueblo, lleno de tiendas de artesanías y casas de piedra, que cada dos años organizan fiestas medievales con justas y competencias.

Desde estas alturas fortificadas se contemplan la llanura de Auxois y el Canal de Borgoña, que siempre son transitadas por ciclistas.

Auxerre

Ubicada en un cruce de ríos, sobre el río Yonne, Auxerre presenta una encantadora postal con sus casas con fachada de entramado de madera, con la catedral gótica de San Esteban con su frente asimétrico y la abadía de San Germán, que data del siglo V. No hay que perderse las pinturas murales del siglo IX de la cripta carolingia.

Auxerre Foto Turismo de Auxerre

Circuito por el río Yonne. Foto Turismo de Auxerre

En Auxerre no hay que dejar de comprar las cerámicas, famosas por su calidad y presentación

Además de los museos históricos hay uno dedicado a la cerámica, una de las artesanías mejor elaboradas en la región.

Abadía de Fontenay

Fundada por San Bernardo en 1118, esta abadía de la orden cisterciense está protegida por la Unesco. Es un conjunto en excelente estado de conservación, un digno ejemplo de arquitectura románica al norte de Borgoña.

Abadia de Fontenay

Abadía de Fontenay. Foto: All Free Photos

Su estética detenida en el tiempo suele ser usada como escenografía para una gran cantidad de películas históricas.

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