Barcelona entra en el mapa del turismo de los ‘porros’

La poliferación de clubs privados de consumo de marihuana han convertido la ciudad española en “la nueva capital mundial de la marihuana”, según una web temática. Una de las principales causas es el vacío legal al respecto.

Los clubes privados de fumadores han aupado a Barcelona hasta lo más alto del turismo canábico. Hasta el punto que Greenline, una de las webs especializadas, asegura que la ciudad es “la nueva capital mundial de la marihuana”.
      

 
Cataluña tiene aproximadamente 200 clubs privados que han proliferado gracias al vacío legal en autoconsumo

 
WebeHigh es otra de las dos principales páginas que anuncian en Internet acceso casi inmediato a “un producto cinco estrellas”. Contactados por 02B, WebeHigh informa que los tours son gratuitos, aunque se requiere pagar una cuota para hacerse socio de los clubes. La entrada en uno de ellos cuesta 20 euros.

Esta página web, con amplia difusión en Facebook y Twitter, trabaja con los espacios RDM, en la calle Bailén; Sweetdreams, en calle Ballester; y El Dragón, en las Ramblas. Son tres de los aproximadamente 200 clubs privados que existen en Cataluña. Han proliferado gracias al vacío legal que supone la legislación en autoconsumo, autocultivo y los atenuantes que aplican los magistrados.

Una vez dentro de ellos, WebeHigh promete acceso al psicotrópico a un precio de 5 a 9 euros el gramo, más barato que en otros países europeos. RDM, por ejemplo, anuncia “una selección completa de variedades Cannabis Indica, Cannabis Sativa, mezclas de Indica/Sativa, hachís, aceites y ceras”.

Lejos del tópico de clubes desaliñados y entradas secretas, las asociaciones de fumadores son espacios diáfanos con todo tipo de comodidades. Muchos tienen barra de bar, nevera, terraza o espacios tipo lounge para un consumo reposado del producto. Además, algunos programan actividades regulares como espectáculos de magia o proyecciones de partidos de fútbol.

Con todo, los operadores amateurs de marihuana exigen garantías y actúan con cautela. Para participar en los toures es necesario el carné de identidad u otra prueba equivalente de la mayoría de edad. El contacto se realiza por teléfono móvil e Internet, a través de páginas web especializadas.

Cabe recordar que en España el cultivo, elaboración, tráfico, promoción, favorecimiento o las facilidades al consumo de droga están penados en virtud del artículo 368 del Código Penal. Con todo, el cultivo para el autoconsumo o para la producción industrial se consideran exentos de punición.

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