Virgin Galactic presume de elegancia en su base espacial

La plataforma de lanzamiento de viajes espaciales, para Virgin, tiene que ser tan elegante como la sala vip de un aeropuerto

Viajar fuera de la atmósfera terrestre tiene que cumplir con el sueño de los turistas espaciales: una experiencia de aventura pero también glamourosa. Por ello Virgin Galactic, como es tradición en las otras compañías del grupo, presume de estilo en su nueva estación de lanzamiento en el desierto de Nuevo México.

El Spaceport America de Virgin Galactic son unas instalaciones creadas por el gobierno de ese estado de EEUU con una inversión de 222,6 millones de euros con la esperanza de convertirlas en la nueva meca del turismo espacial.

Homenaje a la Tierra y al espacio

La estructura central, llamada Puerta al Espacio, fue diseñada por el estudio de Norman Foster + Partners, que busca sintetizar un homenaje al desértico paisaje donde se ubica la infraestructura con el objetivo espacial.

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La idea, según Virgin Galactic, es crear una nueva experiencia para los pasajeros “mientras se preparan para el viaje de sus vidas”.

La planta baja fue creada para la comodidad del pasajero y sus familiares y se llama Gaia, en homenaje a la teoría que postula que la Tierra se comporta como un organismo que busca el equilibrio y la autosustentación.

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La planta inferior es para que los viajeros y sus acompañantes interaccionen con el personal de Virgin. Foto: Viewport Studio.

Como una elegante sala lounge

La paleta de colores usada por los diseñadores de Viewport Studio se centra en tonos pastel de colores verde, marrón, naranja y blanco, con algún toque rojo o amarillo para darle un toque llamativo.

 


Presentación de las instalaciones del Spacesport.

Son los colores del desierto y de las nubes, explica Virgin, que se integran al paisaje gracias a que toda la estructura está recubierta por paredes de vidrio.

Una pasarela digital servirá para que los pasajeros y sus acompañantes inicien la inmersión con el viaje espacial.

La compañía fundada por Richard Branson suele poner el acento en el concepto de la “Familia Virgin”. Para potenciarlo, se diseñó un espacio central llamado Isla Barista donde el personal de la compañía compartirá los momentos previos con los viajeros.

Las instalaciones del Spaceport America, elegantes como la sala vip de un aeropuerto, homenajean a la Tierra y al espacio

En las mesas y la barra del bar los ‘futuros astronautas’ disfrutarán del desayuno con los pilotos de la nave VSS Unity, tomarán un café con los ingenieros aeroespaciales y beberán una copa (sin alcohol, obviamente) con el equipo de la misión de control.

La barra fue construida en mármol italiano, con muebles de madera de roble fabricados a mano.

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Espacios diáfanos para disfrutar de la experiencia del viaje espacial. Foto: Viewport Studio.

Tanto en la tierra como en el cielo

El segundo piso se llama Cirrus, y representa “la luz, el aire y la experiencia de volar”, precisa Virgin Galactic.

Este espacio se presenta en tonos que reflejan el paso del espacio a la Tierra, desde colores blancos a grises más oscuros.

Allí estarán los ingenieros de control, los pilotos y el personal técnico encargado del éxito de la misión.

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A un lado del edificio se encuentra el hangar donde duerme el VMS Eve, el avión de doble fuselaje con 43 metros de envergadura que llevará al Space Ship Two fuera de la atmósfera terrestre.

En esta gigantesca infraestructura se podrán guardar cinco de estas pequeñas aeronaves.

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La sala superior está reservada al personal técnico. Foto: Viewport Studio.

Por ahora solo para millonarios

Actualmente Virgin Galactic tiene 600 reservas confirmadas. Cada uno de los turistas espaciales pagaron 250.000 dólares (225.000 euros) por su billete, pero todavía no hay fecha para el viaje inaugural.

La compañía continúa realizando pruebas en las aeronaves y en el centro de control. Hasta ahora las naves han llegado a una altura de 82,7 kilómetros de la superficie terrestre, a una velocidad que triplicaba la velocidad del sonido.

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