Thai Airways vende hasta los vinos y la vajilla

Thai Airways busca recetas desesperadas para salir de su crisis financiera. La nueva idea de la aerolínea tailandesa es vender cientos de ítems del servicio de a bordo, así como amenities y hasta neumáticos de aviones.

La compañía aérea carga con una deuda de 2.320 millones de euros y en los primeros seis meses del año sus pérdidas llegaron a los 784 millones de euros.

En medio de un proceso judicial para evitar la quiebra, la aerolínea además sufre -como todas las del mundo- la parálisis de operaciones por el coronavirus.

Desde tazas a toallas

En un portal de Facebook Thai Airways presentó la subasta de lotes de productos que se usan en el servicio de a bordo. Allí se pueden ver servilletas de papel, toallitas húmedas para las manos, tazas de plástico y de cerámica y recipientes para servir comidas listas para ser compradas.

La compañía realizó un inventario de artículos que pueden salir a la venta, valorado en 28 millones de euros

Pero parece que no será todo: según el medio tailandés Thai PBS World el personal de la compañía realizó un inventario de qué productos pueden salir a la venta, valorado en 28 millones de euros.

Las ventas de garaje de las aerolíneas

Entre otros productos susceptibles de salir a la venta están las bebidas como vinos y cavas (cabe recordar que en la primera clase de los A380 se solía servir Dom Pérignon y Veuve Clicquot), así como mantas y tapizados de asientos.

No es la primera compañía que hace una venta de garaje de sus productos. También Qantas lanzó promociones para adquirir sus pijamas y carritos llenos de bebidas, aunque en promociones más elegantes que la de Thai Airways.

Las ideas anti crisis de Thai Airways

Esta venta de mercadillo es la punta del iceberg de las medidas de ajuste de la compañía del Sudeste Asiático.

Thai Airways había organizado un restaurante efímero con comida de avión y ofrecido la posibilidad de usar los simuladores de vuelo

Hace pocos días anunció que pone a la venta 34 aviones al mejor postor. Entre ellos se encuentran 10 Boeing 747, que era una de las naves icónicas de la compañía por el nivel de comodidad y servicio a bordo.

Alquiler de oficinas

El presidente Chansin Treenuchagron anunció que pondrán en alquiler varios edificios corporativos, entre ellos la sede central y el inmueble de Rak Khun Thao Fan, en Bangkok.

Otro de sus edificios, el cercano al aeropuerto de Don Mueang, será alquilado por la Autoridad de la Aviación Civil de Tailandia.

Restaurantes y simuladores

Para recaudar fondos y aliviar su crítica situación financiera, a principios de septiembre Thai Airways montó un restaurante efímero en las instalaciones cercanas al aeropuerto de Bangkok, donde se ofrecían comidas como las que se servían a bordo de los vuelos.

El lugar estaba tan adecuado para nostálgicos de los viajes que las mesas eran estructuras de motores y los asientos habían sido extraídos de la clase económica de los aviones.

Además la compañía también ofreció la posibilidad de usar los simuladores de vuelo donde se suele entrenar sus tripulantes, que permitían a los aficionados sentir la experiencia de aterrizar y despegar en un A380 o un B747.