La nueva clase business desmonta el mito de Qatar Airways

La llegada de los nuevos A350-1000 de Qatar Airways se retrasa por problemas en el montaje de la clase Qsuite

La nueva Qsuite de Qatar Airways apunta a ser la clase más lujosa entre las aerolíneas, sobre todo entre las del Golfo Pérsico. La gran novedad de esta sección es que los asientos pueden girar 180 grados y quedar enfrentados entre sí, mientras que unos paneles que se cierran convierten a esta sección de la cabina en un pequeño habitáculo, con más privacidad para los viajeros.

Otro plus es que los asientos se pueden extender como una cama, y con este cerramiento se transforma en una especie de habitación en el aire.

Esta nueva clase se ha podido instalar sin dificultades en algunos Boeing 777 de la aerolínea catarí, pero en el A350-1000 los problemas se suceden cada día.

Según informó el consejero delegado Akbar al-Baker el lanzamiento del nuevo A350-1000 se ha retrasado hasta febrero por la “complejidad en la configuración de los asientos” de la clase Qsuite.

Qatar Airways había anunciado que los A350-1000 volarían antes de que termine el 2017

En la Feria de Turismo de Berlín (ITB), cuando se presentó la nueva clase, se anunció que desde junio se reformará una nave por mes con la Qsuite.

En agosto de 2017 Baker había anunciado que los A350-1000 estarían volando hacia fin de año, pero el retraso llegará a los dos meses. La primera aeronave todavía se encuentra en los talleres de Airbus en Tolouse, donde los técnicos trabajan contrarreloj para que el avión este listo cuanto antes, problema que también retrasa la certificación técnica que necesita la aeronave para poder volar.

Qatar había encargado al consorcio europeo la fabricación de 80 aviones A350, incluidos varios A350-900, de tamaño más pequeño, y que ya están en operatividad.

Además de la novedad del cerramiento, la clase business de Qatar ofrece, además de su menú a la carta, de una variedad de aperitivos disponible en todo el vuelo. Otros nuevos servicios son el de desayuno exprés, fuera del horario de servicio; y el de despertador, aunque como en un hotel, un pasajero puede colocar el cartelito de ‘no molestar’ en la parte exterior del panel.

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