El Prat cerrará la pista principal en enero

La instalación renovará el pavimento de la vía y se verá obligada a reducir el número de operaciones de 72 por hora a sólo 48

El Aeropuerto de El Prat se prepara para un lavado de cara. Con varios incidentes en los últimos meses, la instalación pavimentará la pista principal y renovará sus balizas. Una operación que obligará a cerrar la vía entre el 10 de enero y el 5 de febrero. 27 días en los que el aeródromo funcionará a medio gas.

La fecha no es casual. «Cerraremos después de Navidad y antes del Mobile World Congress, la época en la que hay menos vuelos del año», señalan fuentes de Aena. Mientras se mantengan las obras, se utilizará la configuración nocturna durante todo el día. Es decir: los aviones despegarán por la tercera pista y aterrizarán por la pista transversal al mar.

La nueva configuración reducirá el número de vuelos desde los 72 por hora actuales a sólo 48 por hora.

La operativa podría complicarse en las tres o cuatro jornadas que El Prat se verá obligado a cerrar otra de las vías y utilizar sólo la tercera pista tanto para aterrizajes como para despegues. La medida límite obedece a que las obras también afectarán al tramo de la pista transversal que se cruza con la principal. 

El coste de la acción será de 25 millones de euros y también implicará mejoras en algunos tramos de las calles de salida R1, R5 y R6, deterioradas con el paso del tiempo. Y es que según explican en el aeropuerto, la vida útil de las pistas oscila entre 10 y 15 años. Aena cumple con los tiempos, pues la última remodelación fue hecha hace 11 años.

La obra cuenta con el consentimiento de los vecinos de Gavà Mar, que en su día presentaron dos querellas por el exceso de ruido

La compañía pública aprovechará las obras para renovar las señales de balizamiento con luces LED, más ecológicas. También sustituirá el cableado y los circuitos primarios de pista por unos nuevos. En los bordes de la pista se eliminarán algunos de los obstáculos existentes.

La renovación no comportará nuevas polémicas con los habitantes de Gavà Mar que residen en viviendas colindantes al aeropuerto. «Los ayuntamientos y las asociaciones de vecinos han sido informadas de la actuación», defienden en el aeródromo. 

Evitarán así nuevos enfrentamientos, como los sufridos durante los últimos años por el ruido del aeropuerto. Hasta dos querellas se presentaron contra el personal de Aena, que salió finalmente absuelto. El magistrado determinó que los técnicos «ni decidieron la ubicación de la pista, ni cómo debía usarse».

 

a.
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