Así era el hermano mayor del avión más grande del mundo

Como si el gigantesco Antonov An-225 no fuera suficientemente grande, en los años ’80 se proyectó un avión de un tamaño mayor que habría tenido ocho motores

Diseño de un A325 despegando. Foto KerbalX

El Antonov An-225, el avión más grande de la historia, deja boquiabierto a cualquiera que lo vea aterrizar o despegar. Es tan fuerte su potencia que por sus vórtices deja inoperativo cualquier aeropuerto durante 15 minutos.

Es un auténtico mastodonte volador, una aeronave capaz de transportar locomotoras, generadores eléctricos y cualquier elemento de gran volumen y peso en su gigantesco interior.

Sin embargo el motivo de la concepción de An-225 fue para llevar el transbordador espacial Burán de regreso tras sus misiones.

El concepto es el mismo que los B747 que se usaron al servicio de la NASA para llevar en sus espaldas a los transbordadores Enterprise y Discovery.

El An-225 llevando al transbordador MAKS. Foto Topwar.ru

Hijo de la Guerra Fría

El An-225 se desarrolló en los años ’80 y su primer vuelo fue en 1988. Sin embargo, el colapso de la URSS enterró los planes espaciales del Burán (que no fue más allá de un vuelo de prueba), y el gigantesco avión quedó aparcado por varios años, hasta que resucitó como transporte de cargas ultra pesadas.

El An-225 nació para llevar a su base al transbordador espacial An-225, pero se reconvirtió en avión de carga

Su gemelo quedó construido en un 70% y no hay planes de que algún vía vea la luz.

Modelo de An-325 en el túnel de viento

El gran hermano

Sin embargo, en su árbol genealógico también se puede rastrear un hermano mayor, que no fue más allá de una existencia limitada a boceto y maquetas. Pero que da una idea de las esperanzas que se tenía en este avión.

Se trataba del An-325, que habría sido una versión más grande que el actual avión de bandera ucraniana.

Este modelo fue desarrollado por ingenieros soviéticos e ingleses a mediados de los años ’80.

El proyecto HOTOL

La unión entre expertos de ambos países obedece a que la agencia British Aerospace y Rolls-Royce tenían intenciones de crear un transbordador espacial conocido como HOTOL (acrónimo de Nave espacial de despegue y aterrizaje horizontal), que sea capaz de llevar cargas de diez toneladas en la parte más baja de la órbita terrestre.

Esta aeronave habría tenido un peso al despegar de 226,8 toneladas, que se desprendería de la nave nodriza cuando llegara a los 10.000 metros de altura.

Boceto del HOTOL despegando de un An-325

Es el mismo concepto que los ingenieros aeroespaciales soviéticos también habían pensado para el An-225 con el transbordador MAKS, más pequeño que el Burán y sus primos norteamericanos.

Pero un vehículo como el HOTOL hubiera requerido un avión todavía más grande que el An-225 y con más potencia.

Más grande aún

No se filtraron las medidas sobre este modelo, pero cabe recordar que el An-225 tiene un largo de 84 metros, una envergadura de 88,4 metros y una altura equivalente a un edificio de siete pisos. Su fuselaje tiene un volumen de 1.300 metros cúbicos.

En el caso del An-325, la idea contemplaba llevar ocho motores en vez de los seis que actualmente lleva el An-225.

El An-325 habría llevado ocho motores, en vez de los seis actuales del An-225

Una potencia semejante solo se ha visto en superbombarderos militares, como el Boeing B-52 Stratofortress.

El An-225 ‘Mriya’ es la mayor aeronave jamás construida. Foto: Kārlis Dambrāns-Flickr

Sin futuro

Pero el proyecto quedó a mitad de camino, donde no fue más allá de pruebas con maqueta en túneles de viento.

El An-225 se reconvirtió en un avión de carga usado en ocasiones puntuales, como ha sido su intensa actividad transportando equipamiento sanitario; mientras que el proyecto del HOTOL fue abandonado por el gobierno británico en 1988 y Rolls-Royce hizo lo mismo año siguiente.

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