Los pasajeros podrán rechazar pasar por los escáneres corporales

Bruselas regula el uso de 'bio-escáneres' de seguridad en los aeropuertos europeos

La Comisión Europea ha aprobado este lunes un nuevo marco jurídico que regula el uso de escáneres de seguridad en los aeropuertos de los Estados miembros, incluidos aquellos que detectan elementos no metálicos y reproducen la morfología humana. Estos escáneres corporales atraviesan la ropa, de forma que las pantallas muestran el cuerpo del pasajero, en ocasiones en tres dimensiones. Sin embargo, la regulación permitirá a los pasajeros elegir otras vías de control alternativas y no tener que pasar forzosamente por los escáneres.

Tras la fuerte polémica suscitada en el Parlamento Europeo sobre el uso de este tipo de tecnología por el ataque a la vida privada que pueden suponer, Bruselas ha establecido requisitos de aplicación, tales como que las imágenes deberán visualizarse en una sala aparte de donde se encuentra el viajero. Asimismo, la imagen de la cara tiene que ser difuminada, las imágenes que se analicen no estarán vinculadas a la persona examinada y los pasajeros tendrán derecho a pedir una forma alternativa de revisión.

Sin obligatoriedad para los Estados

Después de haber descartado efectos nocivos para la salud, la Comisión no obliga al uso de este tipo de escáneres, pero permite a los aeropuertos y a los Estados miembros que lo deseen utilizarlos bajo estrictas condiciones operativas y técnicas, que buscan respetar la privacidad de los datos personales, al tiempo que se reducen los tiempos de espera para los controles de seguridad.

Diversos Estados miembros han estado llevando a cabo pruebas de seguridad con estos ‘bio-scanners”– especialmente Reino Unido, Países Bajos, Dinamarca e Francia, Italia– después de que un terrorista intentara el 25 de diciembre de 2009 atentar contra un vuelo de Amsterdam a Detroit con explosivos que había escondido en su ropa interior. Hasta ahora, el uso de escáneres de seguridad se había realizado en base a diferentes procedimientos nacionales, que ahora son regulados a nivel europeo.

Asimismo, no se podrán almacenar, conservar, copiar, imprimir o recuperar las imágenes, y cualquier acceso no autorizado o uso de la imagen está prohibido.

El comisario europeo de Transportes, Siim Kallas, destacó que «los escáneres de seguridad no son una panacea, pero sí ofrecen una posibilidad real para reforzar la seguridad de los pasajeros y son una valiosa alternativa a los métodos de detección existentes porque son muy eficientes en la detección de los objetos metálicos y no metálicos”.

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