Las aerolíneas de Oriente Medio reinventan la primera clase
Etihad mejora los servicios de Emirates y Qatar con una lujosa suite para los A380. El servicio incluye un lavabo con ducha e, incluso, mayordomo.
Las aerolíneas de Oriente Medio han puesto las cosas muy difíciles al resto de compañías en cuanto a lujo se refiere. Firmas como Emirates o Qatar Ariways ofrecen servicios que superan la gama de confort habitual que se le supone a la primera clase. A estas dos, ahora hay que sumar a Etihad. La línea aérea ha presentado recientemente una suite de alta categoría que se incluirá en sus nuevos A380.
Etihad, aerolínea que se encuentra en la tercera posición del ranking de mejores experiencias en primera clase elaborado por 02B, ha bautizado este servicio como Residence. Se trata de una nueva cabina, ubicada en la cubierta superior, que contiene un dormitorio para una o dos personas, salón y cuarto de baño con ducha, comedor, además de los servicios de un mayordomo personal.
El grupo destinará el primer A380 equipado con esta suite a la ruta Abu Dhabi-Londres a partir de diciembre de este año. El precio del billete rondará los 15.000 euros.
Etihad es una aerolínea de referencia en cuanto a lujo. No en vano, cambió el nombre de su primera clase por diamond –diamante, en inglés–. En este servicio, un peldaño por debajo de residence, ofrece a cada viajero un chef personal, vestidor, minibar, armario, mantas de seda, edredón de algodón y almohadas de tamaño estándar.
Otra firma con experiencia en servicios de alta gama es Emirates. Sus A380 incorporan ocho suites para mimar a sus mejores clientes, aunque no están al mismo nivel que el nuevo servicio de Etihad.
Recientemente, la aerolinea de los Emiratos Árabes se ha embarcado en el proyecto executive. Se trata de un servicio vip que se realizará en un avión A319 con una quincena de plazas. La parte delantera del aparato tiene un área para comer y tomar algo. La zona es una especie de lounge, presidida por dos pantallas de 42 pulgadas con acceso a más de 1.500 canales.
La compañía permite seleccionar la comida a gusto del comensal. La parte trasera tiene diez cabinas privadas –similares a las que se pueden encontrar en un viaje de primera clase de la aerolínea–. La zona se complementa con varias duchas spa.
