Hidalgo sobre Ciudadanos: «Yo no plantearía dejar sin AVE al norte de España»

El presidente de Globalia propone una semiprivatización como la de AENA para rebajar el coste público; confirma que Air Europa rompe las negociaciones con Portugal para comprar TAP

El presidente de Globalia (matriz de Air Europa), Juan José Hidalgo, ha entrado en la polémica abierta por el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, sobre el futuro del AVE. Mientras el político catalán es partidario de poner punto y final a la inversión en este tipo de líneas, el empresario apuesta por que los planes sigan tal y como están previstos «y presupuestados». 

«Yo no plantearía dejar al norte del país sin alta velocidad», ha declarado a bordo del primer B787 que opera la compañía aérea. «Cómo explicas ahora a los gallegos y cántabros que se quedarán sin AVE». 

Este tipo de tren es, a juicio de Hidalgo, «el mejor transporte entre ciudades que existe en España». Incluso desde «Air Europa no podemos competir eficientemente contra él». Si el argumento base de Rivera y su gurú económico, Luis Garicano, para echar freno al AVE pivota en el elevado coste que supone para el erario, Hidalgo prevé que la factura bajará sustancialmente cuando se privatice parcialmente. 

Alternativa al plan de Rivera 

«Ha sucedido ya con AENA». El proyecto de privatización del ente aeroportuario –que ha traído nuevos socios al núcleo duro y ha permitido la cotización en bolsa– ha generado una empresa «más barata para el Estado». 

La gestión semiprivada «permitirá más eficiencia en los aeropuertos y una mejor gestión, por ejemplo, de la deuda». Esta fórmula sería válida, en su esquema básico, para el AVE, según el propietario de Globalia. 

La mayor compañía de la industria turística española aspira a gestionar las líneas del AVE que se abran a la competencia. El Gobierno tiene un proyecto, aunque el sector no sabe muy bien qué condiciones finales acabará aplicando. Hidalgo confirma que «ni siquiera hay pliego de condiciones». 

El grupo no confirmará el salto al sector ferroviario mientras los detalles sigan inconcretos. Por ahora, el empresario sólo se moja con una declaración de intenciones y el reconocimiento de que gestionar una aerolínea vacuna contra los dificultades de otros medios de transporte. 

«Para mí sería mucho más sencillo administrar una ferroviaria que Air Europa: los trenes son como chicles; pones los vagones que necesitas y los controladores no causan problemas».   

Globalia abandona TAP a su suerte 

A 40.000 pies (12.000 metros) de altitud y a 0,85 mach (912 kilómetros por hora) Hidalgo ha confirmado que abandona el intento de compra de la portuguesa TAP. Las condiciones del Estado portugués imponían la subrogación de unos 2.500 millones en deuda y de la plantilla (que duplica la de Air Europa). 

«Nos esposábamos toda la vida con unas condiciones que hacían imposible administrar la compañía con criterios de empresa privada». TAP queda ahora expuesta a su propia suerte. El Ejecutivo luso ha reconocido que la firma pública necesita una inyección urgente de recursos. 

El Santander estudia financiar aviones 

Con la operación desechada, Air Europa se centrará en desplegar la nueva flota. La operación no sólo supone una novedad en la implementación de aparatos (22 unidades de B787), sino en la manera de financiarlos. Hasta la fecha, la compañía recurría a intermediarios internacionales para pagar al fabricante. 

Según ha confirmado Hidalgo, los bancos españoles empiezan a considerar al sector como un negocio con oportunidades. El Santander es el más interesado y podría ayudar al grupo en la adquisición de próximos aviones. Hidalgo ha viajado a Estados Unidos para negociar la sustitución de toda la flota de media y corta distancia con B737 Max y cuya incorporación se produciría en 2020.

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