Gobierno y taxistas, a la greña por la reforma de la ley de transporte

El Gobierno prepara una batería normativa para introducir competencia en el transporte privado. El ejecutivo rebajará los requerimientos a los vehículos de alquiler con conductor. El sector del taxi está en pie de guerra y ha presentado alegaciones.

El Gobierno ultima una batería normativa que, de tapadillo, introducirá competencia en el transporte privado de pasajeros y ‘se comerá’ parte de la cuota de merdado del taxi. El Ministerio de Fomento modificará la Ley de Transporte y una norma menor para quitar requerimientos a los vehículos de alquiler con conductor (VTCs).

Los cambios más importantes afectan al precio, señalización y características de los vehículos. Las empresas de alquiler no quedarán sujetas a ninguna tarifa, por lo que podrán fijar libremente los precios. Además, no deberán llevar señalización exterior y se facilita la firma de contratos de arrendamiento.

Este es uno de los puntos más polémicos. Según el sector del taxi, los vehículos VTC ya circulan por las calles a la espera de que un intermediario les facilite un cliente. Cuando lo hace, lo cargan y firman el contrato. «Es competencia desleal«, advierte José Miguel Fúnez, portavoz del sindicato La Élite Madrid.

Alegaciones

Esta organización ha presentado alegaciones a las propuestas de cambio. Exigen que las empresas de alquiler estén sujetas a tarifas, identifiquen a sus vehículos y éstos tengan un tamaño mínimo. «Es para garantizar la comodidad del pasajero», explica el profesional.

De lo contrario, el sector prevé una invasión de coches de lujo en las calles. «Si prospera, la nueva ley poblará los hoteles de Mercedes, que se esperarán en la puerta. Cuando se les consiga una carrera, firmarán un contrato y listo», señala Javier Rodríguez, de Elegance Taxis Barcelona.

Una carrera, 80 euros

Precisamente, este empresario prevé un tsunami tarifario similar al que ocurre con los hoteles. «Sin taxímetros como los nuestros, las empresas pueden cobrar 15 euros por una carrera al aeropuerto cuando no hay demanda, rebentando precios. O 80 euros cuando sí la hay, en caso de congresos o llegada de cruceros», añade Rodríguez.

Otro punto de debate es dónde circulan las VTC. ¿Pueden los vehículos de Madrid operar en, por ejemplo, Valencia? «Con la nueva ley, pueden hacer el 20% de carreras fuera de su región durante tres meses. Queremos rebajarlo a un mes», explica el portavoz de La Élite. El peligro, según los conductores, es que se produzca una avalancha de vehículos en las ciudades que albergan grandes eventos, como la feria del móvil de Barcelona.

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