Norwegian se queda con el A380 de HiFly

El A380 perteneciente a HiFly será alquilado por Norwegian durante agosto en su ruta de Londres a Nueva York

Norwegian alquilará el A380 de la portuguesa HiFly durante agosto para sus operaciones entre Londres y Nueva York. Tras ser usado un par de días por el turoperador Thomas Cook en su ruta entre Copenhagen y Chipre, el gigantesco aparato solucionará los problemas que la aerolínea escandinava tiene por las reparaciones al B787.

Esta aeronave de Boeing tiene que quedar en tierra para que puedan ser revisados sus motores Rolls-Royce Trent 1000. En medio de la temporada alta, cancelar vuelos con más de 300 pasajeros es un trago difícil de asimilar, por lo que Norwegian recurrió a la empresa de leasing HiFly para que le alquile el A380 que pertenecía a Singapore Airlines.

Los pasajeros de Norwegian ganan con el cambio

Los pasajeros que habían comprado sus billetes para volar a Nueva York se encontrarán con la agradable sorpresa de que esta aeronave tiene espacios más amplios que el B787 Dreamliner. De hecho HiFly mantuvo la configuración de primera clase de la aerolínea del Sudeste Asiático, que cuenta con mayor amplitud entre las plazas.

Norwegian operará esta aeronave al menos durante tres semanas de agosto, hasta que el B787 Dreamliner vuelva a estar operativo.

La segunda vida del A380

Esta nave cuenta con 12 años de vida, pero fue desterrado por Singapore Airlines cuando renovó su flota. Dado su alto precio de mercado –aunque sea de segunda mano-, su destino tenía dos vertientes: ser desguazado y vendido por partes, o tener una segunda oportunidad de vida como avión de alquiler.

Norwegian usará el A380 de segunda mano durante agosto en sus vuelos de Londres a Nueva York

Este fue el destino de este avión con registro 9H-MIP, que quedó en manos de la compañía de leasing HiFly, que también cuenta con un segundo aparato de este tipo en su catálogo.

La solución ideal para Norwegian

Esta alternativa le viene como anillo al dedo a Norwegian, que apostó fuerte por ganar la batalla del Atlántico en base a una acelerada expansión en la compra de aeronaves, tanto para los vuelos a Norteamérica como hacia Sudamérica.

Los B787 Dreamliner cuentan con un rendimiento de un 20% menos en el consumo de combustible, razón por la que Norwegian puede ofrecer vuelos de largo radio a bajo coste. Pero tener una aeronave en tierra, sobre todo en período de alta demanda como el estival, descalabra el rendimiento económico de la empresa.

Además el A380 cuenta con 500 asientos, por lo que puede ofrecer más plazas para cruzar el Atlántico (y compensar el alto coste del consumo de sus cuatro turbinas). En esta época los vuelos salen con su pasaje lleno, por lo que la aerolínea escandinava no teme que puedan completarse los asientos.

a.
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