Aena busca el pacto con los vecinos por los ruidos de El Prat
Sólo una asociación de perjudicados se muestra reticente a sellar el acuerdo. La vista se suspende hasta la semana que viene.
Aena quiere zanjar de una vez por todas la polémica por los ruidos del aeropuerto de El Prat. El abogado del gestor aeroportuario, Rafael Entrena, ha propuesto un pacto a las asociaciones de vecinos para cerrar este asunto. El juicio se ha suspendido hasta mañana, a la espera de que las partes se pronuncien sobre el acuerdo.
La causa nace de las quejas de los vecinos por la puesta en marcha de la tercera pista el aeropuerto barcelonés, la que está colindante al mar. En 2004, Aena esperaba que se pudiese utilizar las dos pistas paralelas tanto para aterrizar como para despegar.
Los ruidos ocasionados hicieron cambiar los planes. El Prat decidió instaurar una disposición de pistas segregadas: los aviones despegan en dirección mar por la tercera pista y aterrizan por la interior. Los aviones deben rodar durante unos 10 minutos antes de salir. Ocasionalmente, y debido a condiciones de meteorológicas, se cambia la disposición.
La modificación del dispositivo supuso un sobrecoste en la obra de 20 millones de euros, ha explicado Entrena.
El acuerdo propuesto supone crear una comisión de trabajo entre Aena, El Prat y los vecinos. Además, el gestor aeroportuario también se ha ofrecido a pagar los costes del proceso y abogados, unos 200.000 euros.
En el caso están imputados el ex presidente de Aena, Manuel Azuaga; el ex director general de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Alejandre; y los dos máximos responsables del proyecto de Aena conocido como Plan Barcelona, Francisco Gutiérrez y Francesc Xavier Montoro.
