Soria, cabeza de Extremadura

El año 1912 Don Antonio Machado publicó su libro Campos de Castilla, en el que se incluía un poema titulado Campos de Soria. Una de sus estrofas se iniciaba: “Soria fría, Soria pura, cabeza de Extremadura”. Y algún crítico literario carpetovetónico se mofó de él diciendo que Soria era Castilla y no Extremadura. La verdad es que Extremadura quiere decir “Frontera del Duero”, y por lo tanto Don Antonio, leído y culto él, sabía perfectamente lo que decía cuando escribió estos versos.
     

 
Sucede lo mismo con algunos que hablan de turismo sin saber qué es y quiere decir. Se está hablando con mucha alegría del crecimiento del turismo que nos está ayudando a salir de la crisis. Las cifras de turistas extranjeros en los dos primeros meses han sido espectaculares, excepto en Baleares. Tan espectaculares que casi son increíbles. Y cuando se mira el turismo desde la perspectiva de la crisis se dice que ya estamos saliendo de la misma.

La realidad es que en España la crisis del turismo ha sido anti-cíclica. Cuando empezó la crisis en 2008 toda la economía se hundió. Pero al turismo no le llegó la crisis hasta el 2011, aunque está prohibido decirlo por real orden del Gobierno. Y los síntomas de las estadísticas que se están conociendo en estos primeros meses del año deben preocuparnos seriamente y ocupar sobre todo a los responsables públicos y a los empresarios del sector.

Durante el 2009 tuvimos pérdidas en cuanto a número de turistas extranjeros, no de ingresos por turismo dado que nuestra balanza de pagos mejoró por dos motivos: la disminución de turistas no produjo menos ingresos, sino iguales al año 2008, y cayó casi un 20% el gasto de los españoles saliendo hacia el extranjero.

A partir del 2010 y hasta el 2013 se incrementaron tanto los ingresos como los turistas extranjeros con excelentes resultados para nuestra balanza de pagos.

Igualmente sucedió un fenómeno muy extraño durante los años 2009, 2010 y 2011. El número de viajes (o sea turismo de interior) se mantuvo a pesar de la crisis económica.

De hecho, tanto en 2010 como en 2011 el informe de la CECA detectó incrementos substanciales de puestos de trabajo sumergidos y temporales en el sector turístico: 400.000 en 2009 y 700.000 en 2010. En 2011 hubo una recesión en esos puestos de trabajo sumergidos y temporales, en 2012 desparecieron totalmente y en 2013, año récord del turismo extranjero tanto en número como en ingresos, no hubo creación de puestos de trabajo temporales y sumergidos ni de ningún tipo.
     

 
¿Qué sucedió? Pues que hasta el 2012 los españoles tenían la crisis encima, pero no renunciaron a las vacaciones y a alguna escapada. Pero a partir de entonces se apretaron más el cinturón y se perdieron 40 millones de viajes de españoles.

Pero los carpetovetónicos economistas parece que no quieren ver ni entender y continúan pensando que Soria no es Extremadura, sino sólo Castilla. Porque igual que el crítico machadiano para quien Soria nunca fue frontera del Duero, para estos analistas económicos la crisis es cuando ellos dicen, no cuando se produce en realidad.

Y si la crisis fue en 2008 tiene que haber sido en 2008. Como máximo se puede aceptar hasta el 2009. Y en cuanto a la recuperación, si toca, toca. Es eso de que el turismo está mal si vienen muchos extranjeros y además gastan mucho dinero.

Por cierto, en los inicios del año continúan viniendo muchos extranjeros, pero se está invirtiendo la tendencia del gasto y cada vez gastan menos. ¿Se está enterando el ministro Soria en medio de las energéticas, las gasísticas, las comerciales, las tecnológicas y las logísticas?