Cinco restaurantes en Salamanca para gozar de la mejor cocina

En la Parra, Víctor Gutiérrez, El Mesón de Gonzalo, El Alquimista y La Hoja 21 son nuestros 5 restaurantes imprescindibles en una visita gastro a la capital charra

Pato azulon en texturas con un chutney de calabaza. Foto La Hoja 21.

En Salamanca, la preciosa e universitaria urbe castellanoleonesa, se come de maravilla, ya que la tradición y la vanguardia cohabitan con perfección gracias a un terruño que dispone de una despensa proverbial. Las lentejas de La Armuña, el queso de Arribes, los envidiados jamones y embutidos de Guijuelo, la miel de La Albercay los vinos de la D.O. Protegida Sierra de Salamanca son algunas de las materias primas que podremos encontrar en los que, sin duda alguna, están entre los mejores restaurantes de la ciudad del Tormes, entre ellos En la Parra, flamante ganador de su primera estrella Michelin en la edición 2021.

En La Parra 

En el casco histórico de la ciudad, junto a la iglesia de San Esteban, los seguidores de la buena mesa tienen En La Parra, el restaurante comandado por la chef Rocío Parra y el sumiller y jefe de sala Alberto Rodríguez, que ahora ostenta además una estrella Michelin. El local es pequeño, muy agradable y tranquilo, y lo más curioso es que se accede a su interior entrando por la cocina. En la sala, tan sólo seis mesas dispuestas en un espacio en el que llama la atención un jardín vertical.

Rocío es una chef delicada y dedicada, que propone en su restaurante una culinaria asentada en los productos de la tierra y en los de temporada. Propone dos menús degustación: Pizarra y Granito. El primero, servido al mediodía, consta de 15 pases y tiene un precio de 58 euros. Chicharro marinado, ajoblanco de piñón, piparra y remolacha, tallarín de calamar, carbonara y trufa o el magret de pato, calabaza y curry, son algunos de sus platos.

Rocio Parra es la chef del restaurante En La Parra.

Por su parte, el menú Granito, de 10 pases, se sirve tanto al mediodía como por la noche, y en el hallaremos una versión reducida de las propuestas que se pueden encontrar en el menú Pizarra. Su precio es de 42 euros. Ambas ofertas condensan excelentemente las experiencias y técnicas de la cocina sugerida por Rocío Parra.

Alberto Rodríguez tiene a su cargo una carta de vinos en la que se pueden encontrar las mejores elaboraciones de nuestro país y de la región. Servicio atento y mucha tranquilidad, acompañan a una gozosa experiencia gastro.

Los platos de En La Parra se asientan en losproductos de la tierra y en los de temporada.

Restaurante Víctor Gutiérrez

En la calle Empedrada y frente al Palacio de Congresos de Salamanca se halla el Restaurante Víctor Gutiérrez, que abrió sus puertas en 2001. Nacido en el Amazonas, su propietario y chef es Víctor Gutiérrez, cuya notoria concepción de la cocina basada en una imaginativa fusión de una gastronomía plena en matices y sabores del mundo, le hizo merecedor, casi inmediatamente, de la primera estrella Michelin de la ciudad.

El bocadillo de cochinillo ibérico es una de las creaciones más demandadas en el restaurante Victor Gutiérrez.

El restaurante, con una capacidad muy reducida de tan sólo cinco mesas, es un espacio en el que prima la elegancia, el confort y el buen servicio. No existe una carta como tal, sino dos menús degustación: Raíces y Mestizo (65 y 95 euros) en los que se encuentran algunas de las creaciones más logradas de Gutiérrez como el bocadillo de cochinillo ibérico, el roast beef con remolacha o el sabrosísimo nigiri con anticucho de ternera con ají panka y boniato, entre otros.

El bocadillo de cochinillo ibérico, el roast beef con remolacha o el sabrosísimo nigiri con anticucho de ternera con ají panka y boniato son algunos de los platos indispensables en el restaurante de Víctor Gutiérrez

La carta de vinos, muy bien compendiada, muestra alrededor de 300 referencias nacionales e internacionales. Por otra parte, y en vista de los tiempos complicados que estamos viviendo, en junio de 2020, Víctor Gutiérrez lanzó su segunda marca: SUDAKA, un take away con el concepto de la comida peruana probablemente más canalla de Salamanca.

Víctor Gutiérrez fue el primer chef con una estrella Michelin de Salamanca. Foto: Enrique Carrascal.

El Mesón de Gonzalo

Muy cerca de la emblemática y turística Plaza Mayor encontramos uno de los puntos álgidos de la gastronomía salmantina: El Mesón de Gonzalo, fundado en 1947, y recientemente reformado y dividido en dos conceptos: El Restaurante, en la planta baja, de decoración moderna y agradable con guiños taurinos, y La Barra, en la planta de arriba, que ofrece una visión gastronómica más desenfadada, pero no por ello menos gustosa.

Gonzalo Sendín, su propietario, siempre ha tenido las ideas muy claras y conjuga con sabiduría el legado familiar con un punto de innovación, sin perder de vista la estacionalidad de las excelentes materias primas de la zona.

El comedor de El Mesón de Gonzalo es elegante y cosmopolita

Por otra parte, a los clientes de El Mesón de Gonzalo les encanta disfrutar de los platos del restaurante -más aún en los tiempos que corren- en la terraza. Un espacio abierto y con un mobiliario muy cómodo que ofrece magníficas vistas del casco histórico de Salamanca.

La carta se mueve constantemente, pero aún así hay platos que permanecen como: ‘nuestros callos de toda la vida’, ganadores de la segunda edición del Campeonato Mundial de Callos, o las manitas de cerdo deshuesadas, boniato, trufa y Oporto, que fueron ganadores del XIII Campeonato Nacional Pinchos y Tapas Ciudad de Valladolid.

Los que busquen un punto de vanguardia no deberían perderse el magnífico arroz negro meloso con vieira crujiente y plancton marino. Una excelente carta de vinos y un servicio ágil y atento, complementan una satisfactoria experiencia gastronómica.

Steak tartar de Morucha, tuétano braseado Discarlux y loto. Foto El Mesón de Gonzalo.

El Alquimista

Muy cerca del ágora de Salamanca está la plaza de San Cristóbal, un lugar calmado, lejos del bullicio y el tráfico de otras calles, donde se sitúa el restaurante El Alquimista, el feudo del chef César Niño y su pareja Sandra Martín, cuya función es velar por la sala. Aquí llevan ya 11 años, y su implicación les ha valido ser reconocidos como restaurante BibGourmand por la guía Michelin por su excelente relación calidad-precio.

En un espacio en el que predominan el blanco y una decoración muy personal, Cesar ofrece una valiosa cocina de mercado y de autor, con una reinterpretación muy loable de la cocina tradicional salmantina.

Foto: Restaurante El Alquimista.

A disposición de su clientela hay completo menú de lunes a viernes al mediodía a 17,50 euros, -no se pierdan la delicada lenteja de la Armuña guisada con cerdo o la brocheta de ternera con boniato asado y ensalada de champiñón con setas-. Los sábados, domingos y festivos hay un menú degustación a 38 euros con tres entrantes, un pescado, una carne y dos postres, así como una carta que muestra las virtudes culinarias de un chef comprometido con su tierra, en platos como el tataki de bonito con pesto de queso Hinojosa o el lomo de lechazo con su paté y salsa negra de miel.

La carta de vinos está formada por una buena selección de vinos del terruño, con especial hincapié en las llamativas elaboraciones de la Sierra de Salamanca y las Arribes.

Lomo de lechazo asado, salsa de vino, cacahuete, anchoa y crujiente de patata. Foto El Alquimista.

La Hoja 21

Hace ahora siete años que el restaurante La Hoja 21 ocupa su lugar en la céntrica calle San Pablo. Es un negocio de restauración que posee un comedor de decoración minimalista y muy relajante, que conjuga un interesante cúmulo de detalles como su buen servicio, su bodega, un entorno sin igual y una cocina moderna basada en una respetuosísima reinterpretación de la cocina salmantina de toda la vida. Los artífices de este sueño gastronómico son los hermanos Sebastián y Alberto López, que siguen contemplando la restauración, tras más de 20 años, con la misma ilusión y empeño de sus inicios.

La Hoja 21 es el feudo del chef Alberto López.

En la cocina Alberto y en la Sala Sebastián conforman un tándem de verdadero entendimiento y compenetración. Alberto es un chef que se formó en la primera promoción de la Escuela de Hostelería de Salamanca y continuó su adiestramiento en los restaurantes de cocineros de la talla de Arzak o Subijana. Su cocina es creativa, evolucionada, utilizando siempre en sus elaboraciones los mejores productos de la tierra.

En la carta se aprecia un menú muy completo, servido de lunes a viernes, al buen precio de 16,90 euros, en el que se descubren platos como las placenteras pochas con chipirones o el cordero a la parrilla con champiñones, salsa de romero y miel. Además, cuenta con tres menús degustación a 38, 42 y 44 euros que permiten comprobar las artes culinarias que se gasta Alberto López, y que deben ser acompañados por algunos de los vinos propuestos por Sebastián. Nuestra recomendación es que se aventuren a probar el vino de la bodega en propiedad que los hermanos López poseen en la Sierra de Salamanca.

Para terminar, tartita de queso y su helado. Foto: La Hoja 21.

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