Por qué en Finlandia hay más saunas que bares

La sauna en Finlandia es una institución que va más allá del relax al cuerpo. Punto de encuentro social, se la encuentra hasta en norias y hamburgueserías

En Finlandia hay más saunas que coches. O que bares. Y si los 5,4 millones de habitantes del país tuvieran la idea de concurrir en parejas al mismo tiempo a estas terapias de calor y vapor, todavía quedarían lugares vacantes.

La sauna es una ceremonia de relax y bienestar que desde este país escandinavo ganó fama universal, y aunque el invierno esté a la vuelta de la esquina hay que aprovechar esta estación para descubrirla

Es que una de las sensaciones más escalofriantes y a la vez emocionantes es combinar el calor de la sauna con los chapuzones en agua helada o el contraste térmico que hay del vapor junto a la nieve.

En este país de cientos de lagos y bosques que parecen infinitos, la sauna es tanto un ritual de purificación para el cuerpo y la mente como un punto de encuentro social. De hecho, muchos negocios se suelen cerrar en medio del vapor y el sudor, como una forma de acercamiento que va más allá del interés empresarial.

Toda clase de saunas

Las saunas más comunes son la de leña, la de humo y la eléctrica, pero en realidad existen casi tantas variedades como de la palabra «nieve» en finés. Entre sus versiones más originales destacan la sauna de hielo, la sauna móvil (un remolque donde se viaja mientras el cuerpo se relaja) o la sauna cultural.

Es común que las saunas sean puntos de encuentro social, o en donde se cierren negocios

Entre todas ellas lo que tienen en común es que la temperatura oscila entre los 80º y 90º grados, aunque algunas elevan el termostato a 100º .

Hay saunas que realizan masajes con ramas.
Hay saunas que realizan masajes con ramas.

Aunque en Finlandia es costumbre ir a la sauna desnudo, incluso con desconocidos, el traje de baño está totalmente aceptado. En general no es una actividad mixta: los hombres la toman por un lado y las mujeres por otro, aunque los grupos de familia o amigos suelen compartirla juntos.

Las saunas más originales

En búsqueda de cuáles son las saunas más originales, los finlandeses siempre tienen alguna nueva propuesta.

Para introducirse en este mundo, quien llega por primera vez a Helsinski puede visitar Allas Sea Pool, en pleno centro de la capital del país. Es una buena forma de conocer la cultura balnearia de Finlandia, a través de tres grandes piscinas (una de ellas con agua de mar purificada) y otras tres saunas: una para hombres, otra para mujeres y una para eventos privados.

A quien quiera combinar el relax con una cuota de vértigo podría probar la Sky Wheel Sauna que es nada menos que una sauna en el interior de una noria. Con capacidad para cinco personas, ofrece unas espectaculares vistas sobre Helsinski, que se combinan con un baño en el jacuzzi montado en la parte inferior.

 Sky Wheel Sauna permite tomar un baño de vapor en una noria.
 Sky Wheel Sauna permite tomar un baño de vapor en una noria.

Pero una mayor cuota de aventura la pone el Teleférico Sauna de Ylläs, en la región de Laponia. En su recorrido de 20 minutos, el viajero puede experimentar sensaciones inéditas de estar relajando su cuerpo mientras el módulo a 80º transita por las alturas.

Complejos gigantes y para amantes de las maratones

Entre los complejos más grandes se encuentra la Sauna Löly, con 1.800 metros cuadrados, que a la distancia se distingue por su vanguardista edificio de madera, situado a orillas del Báltico. Día y noche hay gente disfrutando del calor, además de su interesante oferta gastronómica basada en productos de temporada.

Para amantes de las maratones, la Ruta de la Sauna propone descubrir nueve centros en un solo día, combinando alternativas como la sauna de hielo o viajar en un autobús-sauna. Estos tours se realizan en la región de Ruka Kuusamo, en la región central del país.

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El moderno diseño de la Sauna Löly guarda un complejo de 1.800 metros cuadrados.

En Finlandia hay saunas hasta en los Burguer King, aunque se recomienda ir sin alimentos ni bebidas en la mano.

Austeridad y poca luz

La costumbre de la sauna es más austera de lo que se cree: aquí no hay ni luces de colores ni fragancias a bosque: la oscuridad es casi completa, no hay música y apenas un cierto aroma a brea natural.

La idea es que los sentidos se relajen, el cuerpo se renueve y se pise la nieve con nuevas energías. Si millones de finlandeses lo tienen como parte de su rutina, es que no hay razones para dudarlo.

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