Cinco experiencias para atrapar la magia de Cannes

Glamourosa y sofisticada pero orgullosa de su pasado de pescadores y peregrinos, la elegante villa de Cannes es mágica hasta en invierno

La Costa Azul brilla todo el año, y por más que el invierno reduzca las horas de sol, el suave clima de la Riviera Francesa abre las puertas a descubrir una de sus villas más emblemáticas: Cannes.

Estas cinco experiencias son la mejor forma de capturar su espíritu, mientras la ciudad se prepara para su cita máxima, el Festival de Cannes que del 12 al 23 de mayo congregará a los talentos más grandes del cine mundial.

Pasear (y comprar) en La Croissette

Con una extensión de tres kilómetros, La Croissette es uno de los paseos más famosos de Europa.

Hasta mediados del siglo XIX era un terreno yermo, solo habitado por pescadores, de dunas y juncos; pero la llegada de visitantes en búsqueda de sol y temperaturas más agradables llevó a la primera de sus varias urbanizaciones, que alcanzó su punto cumbre en 1960, mientras Cannes se consolidaba como uno de los faros del glamour europeo.

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Mientras las autoridades creaban playas artificiales las grandes firmas de lujo echaron raíces en el paseo.

Paseo de La Croisette. Foto: SEMEC-Perreard.

Paseo de La Croisette. Foto: SEMEC-Perreard.

Con sus palmeras en el centro del boulevard, es un lugar para ver y ser visto en las cafeterías, las terrazas de los hoteles y en las carpas de las playas privadas cuando llega el verano.

Pero no todo es glamour y compras, porque allí se encuentran interesantes puntos culturales como el Centro de Arte La Malmaison, ubicado en las antiguas instalaciones de Grand Hotel.

Dormir y cenar en el Hotel Martínez

Entre los alojamientos más emblemáticos de Cannes destaca el Hôtel Martinez. Con 409 habitaciones y suites, fue construido en 1929 en un elegante estilo art decó, y renovado siguiendo su línea hace dos años por el interiorista Pierre-Yves Rochon.

La Croissette, en sus tres kilómetros de hoteles, tiendas de lujo y restaurantes, es uno de los paseos más famosos de Europa

En sus interiores destacan los muebles de laca con colores pastel en amarillo y azul, con gigantescos candelabros en el lobby, pisos de mármol y elaborados arreglos florales.

Vistas desde el restaurante La Palme d'Or. Foto: Hotel Martinez.

Vistas desde el restaurante La Palme d’Or. Foto: Hotel Martinez.

Miembro de la marca de lujo Unbound Collection de Hyatt, el Martinez cuenta con su playa privada, el centro de relax Raphael Beauty Spa, cinco restaurantes y el Martinez Bar, especializado en sofisticados cócteles de placer.

La Palme d’Or, uno de sus restaurantes, es el único local con dos estrellas Michelin de la Riviera francesa, donde brilla la creatividad del chef Christian Sinicropi, basada en preparaciones con ingredientes locales y con un notable respeto por la tradición del sur del país.

Recorrer la ciudad vieja

La historia de Cannes, con su pasado de pescadores, comerciantes y peregrinos, se puede conocer en Le Suquet, el barrio afincado en lo alto de una colina que dio nacimiento a la villa.

Es un bonito enclave de calles pequeñas, escaleras sinuosas, que hay que subir y subir hasta la última elevación. Pero las vistas valen la pena el esfuerzo.

 
La ciudad vieja de Cannes. Foto: Reuben Mcfeeters-Unsplash

La ciudad vieja de Cannes. Foto: Reuben Mcfeeters-Unsplash

Entre los atractivos del paseo se encuentran las murallas medievales, la torre cuadrada de defensa, la antigua iglesia y el Museo de la Castre, que se encuentra en el castillo del siglo XI con un patrimonio etnológico de diversas partes del mundo.

Otros imprescindibles son el mercado Forville con su atractiva oferta de productos regionales y las pintorescas tiendas de alimentación que lo rodean.

El puerto

Debajo de la ciudad vieja se encuentra el puerto de Cannes. Aunque la tradición marítima lleva centurias, la parte más nostálgica es el Quai Sant Pierre, que data de 1838, donde antiguas jarcias de pesca comparten lugar con impresionantes yates, que cuando llegan los calores estivales se convierte en un despliegue de ostentación náutica.

Puerto viejo de Cannes. Foto: SEMEC-Fabre

Puerto viejo de Cannes. Foto: SEMEC-Fabre

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Los amantes de la navegación tienen agendado el Festival de Yates de Cannes, donde cientos de embarcaciones clásicas despliegan sus velas en varias regatas.

Islas Lérins

Desde el puerto, precisamente, parten las excursiones a este archipiélago que se encuentra frente a la bahía de Cannes.

En la prisión de Fort Royal, en la isla Sainte-Marguerite, estuvo preso el Hombre de la Máscara de Hierro

En un paisaje rocoso de interesante belleza, allí se pueden contratar excursiones para descubrir aves o conocer la historia del Fort Royal, construido por el ejército español en el siglo XVII que hoy alberga un museo marítimo.

Las islas Lérins, frente a Cannes. Foto: Semec-Dervaux

Las islas Lérins, frente a Cannes. Foto: Semec-Dervaux

Esta fortaleza de la isla Sainte-Marguerite es donde que, dice la leyenda, estuvo prisionero el Hombre de la Máscara de Hierro, noble de identidad desconocida que popularizó Alejandro Dumas.

En la isla más pequeña de St-Honorat se encuentra desde hace siglos una orden de monjes de la orden de San Benedicto, que elabora vinos de alta calidad, licores y aceite de oliva. Vale la pena probarlos.

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