Eindhoven: adiós ciudad prohibida, hola diseño

Viaje al corazón de la ciudad prohibida de Eindhoven, la antigua fábrica de Philips renacida como epicentro de la vanguardia europea

Durante buena parte del siglo XX el ritmo de Eindhoven lo marcó el gran reloj de la factoría Philips, un complejo conocido como la ‘ciudad prohibida’ por las limitaciones de acceso. La marcha de la multinacional destruyó numerosos puestos de trabajo pero, a cambio, permitió que su antigua sede se convirtiese en uno de los epicentros de la vanguardia europea.

Casi como un burgo medieval, el enorme espacio ocupado por Philips en Eindhoven, Holanda, estaba vetado para quienes no tuviesen relación directa con la marca, que producía allí miles de pequeños y grandes electrodomésticos que distribuía por todo el planeta.

Así fue hasta que los nuevos vientos y la diversificación llevaron las diferentes líneas de fabricación hacia otros puntos de Holanda y del resto del mundo.

Como consecuencia de la marcha de Philips, Eindhoven ganó 27 hectáreas de terreno en pleno centro con enormes naves, perfectas para acoger a todo tipo de artistas, creadores y diseñadores

¿La consecuencia de la marcha de Philips? Que Eindhoven ganó 27 hectáreas, en pleno centro, repletas de enormes naves ideales para la creación, lo que ahora se conoce como Strijp-S.

Piet Hein Eek. Foto Turismo de Holanda.
La marcha de Philips dejó libres enormes naves de estética industrial. Foto Turismo de Holanda.

Así, pronto empezaron a asentarse aquí artistas, jóvenes profesionales y diseñadores, que trajeron la modernidad y se convirtieron en punta de lanza de las nuevas tendencias en Europa.

Inquilinos notables

Caso emblemático es el de Piet Hein Eek, uno de los más prestigiosos diseñadores del país, que ha situado aquí su principal foco de negocio.

Piet Hein Eek, uno de los más prestigiosos diseñadores del país, situó en este área su principal foco de negocio

Así, su espacio incluye tanto los estudios donde su equipo idea los llamativos y funcionales muebles y objetos de decoración que caracterizan a la marca, como el almacén donde se muestran y venden, distribuido en varios niveles.

Además, diferentes salas de exposiciones para todo tipo de artes, talleres en los que trabajan todo tipo de artesanos y creadores…

Restaurante Piet Hein Eek, Eindhoven. Turismo de Holanda.
Uno de los prestigiosos inquilinos de Strijp-s es Piet Hein Eek. Foto Turismo de Holanda.

La propuesta de esta marca también incluye un agradable espacio gastronómico en el que tomar desde el primer café de la mañana, al lunch, una cerveza a la salida del trabajo o una cena con mucho estilo.

Arte y verduras (orgánicas, claro)

Uno de los lugares más interesantes de este nuevo barrio es la gran plaza central, habitualmente “ocupada” por todo tipo de manifestaciones artísticas organizadas por sus propios vecinos y abiertas a todo aquel que quiera disfrutarlas.

Junto a la gran plaza central del barrio se sitúa un atractivo mercado gastronómico que tiene en su planta superior un invernadero donde se cultivan verduras orgánicas

Junto a la plaza se sitúa un atractivo mercado gastronómico (cómo no), que tiene en su planta superior un invernadero donde se cultivan verduras orgánicas.

Strijp s, Eindhoven. Turismo de Holanda.
El barrio Strijp-s acoge todo tipo de locales de creación y de ocio. Foto Turismo de Holanda.

Y también junto a plaza está el café y heladería Inteligentia, uno de los más activos y divertidos puntos de encuentro para locales y visitantes.

Eso, con permiso de Pastry Club, pastelería, chocolatería, heladería y café de la que cuelgan las grúas de la antigua nave de montaje que fue durante los tiempos de Philips, y donde sus maestros reposteros muestran a sus clientes la elaboración de sus creaciones: el obrador está completamente a la vista.

Pastry Club, pastelería, chocolatería, heladería y café, acoge las grúas de la antigua nave de montaje que fue durante los tiempos de Philips

Restaurantes y skateparks

Para los más jóvenes está la opción de Area 51, probablemente uno de los skateparks más grandes y completos de Europa: 3.000 m2 de rampas, medios tubos, barandillas, pipes y otras diversiones para patinadores. Además, con un diseño realmente llamativo. Desde luego, todo un espectáculo.

 

Como el del restaurante Radio Royaal, uno de los preferidos de la zona por sus inmensos espacios, por el llamativo aprovechamiento de los elementos industriales existentes en la nave que ocupa.

La artística distribución de los objetos más diversos (y llamativos) en sus diferentes ambientes y una atractiva carta de platos internacionales revisitados a partir de ingredientes puramente holandeses completan su interesante oferta.

Como última recomendación cabe mencionar la visita al Philips Museum, ideal para amantes de la tecnología y también para quien quiera entender la relación entre la ‘ciudad prohibida’, Eindhoven y la propia Holanda.

Philips Museum. Foto Turismo de Holanda.
El Museo Philips completa la oferta de cultura y ocio del animado barrio de Stripj-s. Foto Turismo de Holanda.

a.
Ahora en portada