Ikea se pasa al diseño de moda
Con un guiño a la estantería Billy, su producto más vendido, Ikea lanza su primera colección de moda (de momento, solo en Japón)
No es la primera vez que un producto de Ikea coquetea con la moda o, es más, sube a una pasarela. En forma de ‘homenaje’, Balenciaga presentó su bolso Arena en el desfile masculino de Primavera/Verano 2017 durante la Semana de la Moda de París.
Enorme, con doble asa y de un color azul sospechosamente similar al de la bolsa Frakta de Ikea aunque de piel en lugar de plástico y a un precio, eso sí, bastante superior: 1.700 euros frente a los 75 céntimos que cuesta la del gigante sueco.
La firma aprovechó la ocasión para responder de forma ingeniosa a la creación del director creativo de Balenciaga, Demna Gvasalia, y publicó en sus redes sociales una guía para identificar la verdadera bolsa Frakta, que incluía desde probar que cruje a llenarla de agua y, por supuesto, comprobar su precio.
La misma bolsa, incluso respetando el logotipo en amarillo del fabricante de muebles, fue transformada después en una gorra por las marcas estadounidenses de moda urbana Pleasures y Chinatown Market, que incluso adaptaron la respuesta de Ikea a Balenciaga para realizar su propia publicidad del producto.
Pero esta es la primera vez que es Ikea la que se lanza al diseño de moda, con una colección exclusiva creada por su división japonesa y, por supuesto, con nombre impronunciable en sueco, EFTERTRÄDA.
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Un guiño a la librería Billy
La colección, que se vende desde el 6 de agosto en tiendas y online exclusivamente en el mercado japonés, “está inspirada y hecha para la gente de Tokio”, afirma la compañía, que plantea como una sucesión natural vestir a los jóvenes con ropa y accesorios como ya viste sus hogares (EFTERTRÄDA significa precisamente sucesor en sueco).
Entre las prendas se incluyen camisetas, sudaderas con capucha, una bolsa de tela, un paraguas, toallas y una botella de agua.
La mayoría de las prendas están hechas en blanco, con un código de barras impreso, que tampoco es casual: corresponde al de su mueble más vendido en el mundo, la estantería Billy (solo superada en ventas por sus famosas albóndigas).
Además, todas las prendas llevan el distintivo logo de la firma (que no es difícil ver en camisetas pirata en Tokio).
Diseño simple y funcional
Solo la toalla y la botella de agua reutilizable se ofrecen también en color amarillo intenso, el mismo que aparece en su logotipo y en la ropa de los empleados de la cadena.
En cuanto a los precios, en línea con los productos asequibles de Ikea, encontramos la camiseta por 11,85 euros, la sudadera por 19,75 euros, la botella por 3,15 euros o la toalla por 10,26 euros (todas las prendas, además, están rebajadas para los clientes con la tarjeta Ikea Family).
La bolsa de tipo tote bag realizada en algodón reciclado tiene un precio de 4,75 euros y el paraguas, a partir de plásticos reciclados, vale 5,50 euros (es el único que no está disponible actualmente para la compra online).
Inspirado en los jóvenes de Harajuku
Los jóvenes del animado barrio de Harajuku en la capital japonesa y la diversidad cultural que se respira en la zona están detrás de esta colección.
La firma contó con la colaboración de cinco personajes únicos del lugar para conocer cómo expresaban su personalidad en sus propios hogares, entre ellos un director creativo, un músico, un fotógrafo y una modelo.
La quinta estrella del lookbook ni siquiera es humana: se trata de imma, la modelo virtual que acumula miles de seguidores en el mundo.
A través de su experiencia y basada en el enfoque de Ikea de la decoración del hogar surgieron estas propuestas de ropa y accesorios simples y funcionales, que ya han provocado colas en las tiendas japonesas del fabricante. ¿La buena noticia? No hay que montar nada en casa.