Hermès enamora en Ámsterdam con su tienda de ladrillos de cristal

La tienda Hermès de Ámsterdam ocupa un local con una fachada de ladrillos de vidrio, que dotan una imagen de modernidad a las antiguas construcciones

Hermès abrió su nueva tienda en Ámsterdam en uno de los locales más originales que se pueden encontrar en la ciudad holandesa: es la Casa de Cristal, un comercio donde la mitad de su fachada son ladrillos de vidrio, lo que le da un aire elegante que también sirve de homenaje al pasado industrial del distrito.

Esta llamativa construcción se encuentra en la calle Pieter Cornelisz Hooftraat, uno de los paseos más elegantes donde también se encuentran negocios de Prada, Dior y Rolex.

El desafío de unir modernidad y tradición

Este local heredó una antigua casa de dos plantas, similares a las construcciones centenarias que flanquean los canales de Ámsterdam. Hace tres años el estudio de Róterdam MVRDV inició una vanguardista transformación del inmueble, donde se planteó reemplazar los ladrillos de la mitad inferior de la casa por bloques de vidrio.

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La fachada de la Casa de Cristal parece desvanecerse. Foto: Daria Scagliola & Stijn Brakkee-MVRDV.

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No era una tarea nueva para estos arquitectos, especializados en construir fachadas de cristal por todo el mundo.

El estudio MVRDV tiene una larga experiencia en construir edificios y fachadas de cristal

Estos ladrillos transparentes fueron fabricados por la compañía Poesia, de Venecia, y fueron unidos con un pegamento incoloro fabricado por la firma alemana Delo Industrial Adhesives. Según dijeron los arquitectos de MVRDV a la publicación Deezer, esta nueva construcción es más resistente que el hormigón.

La fachada que desaparece

A medida que asciende la pared los ladrillos de cristal se reemplazan paulatinamente por los bloques de terracota, lo que da la sensación de una estructura que se desvanece suavemente.

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Hermès ocupa la tienda que antes pertenecía a Chanel. Foto: Daria Scagliola & Stijn Brakkee-MVRDV.

La idea del estudio de arquitectos fue dar una solución a la pérdida de identidad de las construcciones de la ciudad, que caen bajo la picota cuando su estructura está deteriorada o no se adapta a las exigencias de sus nuevos inquilinos.

Este fenómeno no es exclusivo de Ámsterdam, sino que sucede en todas las ciudades turísticas con un centro histórico, sea Venecia, Barcelona, Múnich o Brujas.

La idea del estudio de arquitectos fue dar una solución a la pérdida de identidad de las construcciones de la ciudad

El primer ocupante de la Casa de Cristal fue Chanel, y ahora pasó el testigo a Hermès.

Un frente más transparente

El estudio de interiorismo RDAI quitó una pared blanca que había en la parte superior de la fachada y el frente parece más despejado que antes. Incluso ahora desde la calle se puede ver a las personas que se encuentran en el primer piso del local, lo que antes era más difícil.

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Los ladrillos de terracota son reemplazados por los de vidrio. Foto: Daria Scagliola & Stijn Brakkee-MVRDV.

“Ahora la fachada es tan abierta como la habíamos imaginado”, dijeron fuentes de MVRDV.

La renovación puertas adentro

Otros cambios en el interior del local de 620 metros cuadrados son los nuevos mosaicos del suelo, cuyos motivos geométricos están inspirados en los dibujos que Hermès tiene en la calle Fauborg Saint-Honoré, en París.

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Los accesorios de los hombres y mujeres se presentan en zócalos y bloques de madera maciza, mientras que los famosos pañuelos cuelgan desde grandes marcos cuadriculados.

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El frente del edificio se confunde con el exterior. Foto: Daria Scagliola & Stijn Brakkee-MVRDV.

En la parte trasera hay un sector alfombrado donde se presentan algunas prendas de vestir y zapatos.

Para llegar al primer piso hay una elegante escalera de madera oscura con barandillas de cuero rojo, que conduce a la colección de relojes y joyas

El local rebosa de tonos cálidos y caramelo, que es un guiño a los edificios centenarios de Ámsterdam, que visten ladrillos oscuros en sus fachadas.

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