Así crean los interioristas más brillantes de la década

Más de 100 diseñadores presentan las tendencias de la década, donde además del buen gusto y la comodidad ganan lugar la sostenibilidad y los cambios ante las nuevas formas de vivir

El confinamiento por la pandemia ha dado un nuevo valor al diseño de interiores. Ambientes donde uno solo estaba de paso se han convertido en improvisadas oficinas. Y espacios a los que no se les solía asignar importancia han cobrado nueva vida.

Por usar una analogía informática, ha cambiado la experiencia del usuario con respecto al interiorismo.

Residencia de Malibú diseñada por Romanek Design Studio. Foto Justin Coit. 

Nuevos desafíos

Este es uno de los nuevos desafíos que se imponen a la decoración de interiores, que se suma a otros cambios de la última década como la importancia de la sostenibilidad y la dicotomía si el diseño debe servir para relajar o estimular los sentidos de los ocupantes. O las dos cosas.

Los cambios en las tendencias de interiorismo se analizan en la obra By Design: los mejores diseñadores de interiores del mundo (editorial Phaidon), un libro donde 90 expertos (entre interioristas, editores de publicaciones, escritores, fotógrafos, restauradores y directores creativos) eligen a los 100 mejores talentos de este mundo.

Restaurante Beefbar París, de Humbert-Poyet. Foto Francis Amiand

El interiorismo tiene que responder al cambio de experiencia del usuario respecto a las viviendas y sus espacios

De cada diseñador nominado se presenta su biografía y obras más destacadas, donde no solo se abarcan los que han dado nueva vida a viviendas privadas, sino a los que aplicaron su creatividad y sensibilidad a hoteles, restaurantes, comercios, salones de muestra y bares.

By Design, el libro con los mejores diseñadores de la década. Foto Phaidon

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Cambio de paradigma

Según precisa William Norwich (director de la colección de libros de diseño y moda de Phaidon), el nuevo siglo trajo un cambio de paradigma: mientras que en el siglo pasado la prioridad pasaba por la ostentación y la comodidad material, en la actualidad los diseñadores están más preocupados por cómo la distribución y decoración de los espacios impactan en las personas.

Es interesante ver cómo cada miembro del numeroso juzgado tiene sus razones para elegir a uno u otro diseñador.

Para la experta en arte Eleanor Acquavella lo importante es “la habilidad para decorar viviendas sin que parezcan que son sus hogares”.

Apartamento privado en Sídney, de Greg Natale. Foto Anson Smart

Según el escritor Spencer Bailey, es más interesante tener en cuenta a diseñadores que no se toman demasiado en serio a si mismos “y vuelan lejos de su zona de confort”.

La sostenibilidad ante todo

En cambio para Helen Barret, experta en interiorismo del Financial Times, el norte pasa por tener “respuestas inteligentes a los retos de la sostenibilidad”, ya sea en el uso de determinados materiales y en la prioridad en la reutilización de objetos.

Para Helen Barret, experta en interiorismo del Financial Times, los mejores diseños de interiores son los que ofrecen “respuestas inteligentes a los retos de la sostenibilidad”

En esto coincide con Graeme Brooker, director de los programas de diseño de interiores del Royal College of Art, quien considera que los profesionales del sector deben reflejar las preocupaciones actuales, desde el respeto al medio ambiente hasta el de los derechos humanos.

El Mandarin Oriental Hyde Park diseñado por Joyce Wang. Foto Edmon Leong

Algunos elegidos

Entre los diseñadores elegidos se encuentran el estudio ASH de Nueva York y sus políticas de reutilización y revitalización de objetos y materiales, el equilibrio de estética y racionalidad de Batiik Studio de París, y los criterios emotivos de Kelly Behun al momento de elegir objetos decorativos.

La diseñadora de hoteles y restaurantes Dorothée Meilichzon, con sus propuestas para el hotel de agroturismo Menorca Experimental, crea ambientes con enfoques históricos para que un alojamiento de lujo se parezca más al atelier de un artista.

Nate Berkus, de EEUU, esquiva las tendencias y prefiere apostar por piezas antiguas y en desuso para crear muebles contemporáneos.

Al momento de diseñar André Fu, de Hong Kong, privilegia la relación entre luz y escalas en los hoteles y restaurante que pasaron por sus manos.

Residencia Gyedong Hanok de Seúl, por Teo Yang. Foto Hur In Young
Residencia Gyedong Hanok de Seúl, por Teo Yang. Foto Hur In Young

Mientras que para el estudio Hare + Klein, de Sídney, todo lo que salga de sus tableros tiene que tener impresa la palabra ‘confort’.

“Cada hogar es como el centro del universo”.

Isabel López-Quesada

Beata Heuman apuesta por los colores pastel para sus creaciones que recuerda a las películas de Wes Anderson, y el belga Gert Voorjans muestra cómo un castillo medieval de Bavaria puede convertirse en un acogedor hogar familiar.

Una española entre los 100 nominados

En el centenar de diseñadores se encuentra una española: Isabel López-Quesada, quien ha diseñado las sedes corporativas de grandes firmas como Iberia y Acciona y las embajadas del país en Doha, Senegal y Tokio.

Hotel de la Coupole, en Vietnam, por el estudio Bensley. Foto Bensley | Krishna Adithya
Hotel de la Coupole, en Vietnam, por el estudio Bensley. Foto Bensley | Krishna Adithya

Sin embargo se siente más a gusto diseñando ambientes para vivir: “un hogar para mí es todo, es como el centro de nuestro universo”, dice en un corto filmado para Zara Home.

Jugando con el eclecticismo en formas y colores, López-Quesada logra que cambia ambiente sea “un santuario” donde cada persona “se pueda sentir como uno mismo”.

Foto de portada: Bar y café Paladio, de Marie-Anne Ooudejans. Foto Henry Wilson

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