Quinta da Pacheca: el glamping llega a las bodegas

En la región portuguesa del Alto Douro, diez barricas de vino gigantes esconden las lujosas habitaciones que llevan el enoturismo al siguiente nivel

De las más innovadoras bodegas de arquitectura de vanguardia a los hoteles que se alzan entre viñedos, pasando por los maridajes de vino con música, teatro o estrellas, las experiencias en torno al vino no dejan de sorprendernos. Ahora, un alojamiento ha logrado una nueva perspectiva, que nos sitúa literalmente dentro de una barrica.

Se trata de Quinta da Pacheca, en la región portuguesa del Alto Douro, una de las primeras bodegas de la zona en embotellar vino con su propia etiqueta, en 1738, y dedicada al negocio del vino desde 1903.

A alrededor de 130 km de Oporto y en la localidad de Lamego -uno de esos tesoros lusos desconocidos-, no muy lejos de Peso da Régua, la bodega Quinta da Pacheca elabora vino desde 1903

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A alrededor de 130 km de Oporto y en la localidad de Lamego -uno de esos tesoros lusos desconocidos-, no muy lejos de Peso da Régua, la bodega Quinta da Pacheca continúa elaborando vino más de un siglo después, dirigida ahora por Paulo Pereira y Maria do Céu Gonçalves.

Quinta da Pacheca, interior del barril.

Ofrecen también visitas, catas y restaurante, que complementan con el alojamiento en la mansión del siglo XVIII de la finca. Pero ahora suman un nuevo atractivo que promete revolucionar el enoturismo que conocemos.

Ya conocemos hoteles en los que se duerme entre barricas, pero en Quinta da Pacheca lo haremos literalmente dentro de una de ellas

Dormir en una barrica

Y es que conocemos hoteles en los que se duerme entre barricas, pero este es el primer lugar donde lo haremos literalmente dentro de una de ellas.

Entre viñedos y olivares centenarios emergen hasta diez de estas gigantescas barricas, cada una con más de 25 m2 con dormitorio y baño completo, además de una terraza privada que invita a relajarse (con una copa de vino en la mano, por supuesto).

Quinta da Pacheca, interior.

En el interior, realizado completamente de madera, las habitaciones están equipadas con lujosas camas, wifi y aire acondicionado, además de un amplio tragaluz que permite ver el cielo estrellado sobre nuestras cabezas.

Además de la estancia se ofrecen todo tipo de experiencias, como catas y degustaciones de vinio, talleres de cocina, picnics, pisado de la uva o etiquetado de botellas, además de excursiones en bicicleta por los viñedos y en barco por el río Duero

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Enoturismo en estado puro

Explorar los viñedos para descifrar todos los secretos del vino es tan sencillo como abrir la puerta de la barrica.

Además, se ofrecen todo tipo de experiencias, como catas y degustaciones, tanto de vino como de aceite y mermelada, entre otros productos elaborados artesanalmente en la propiedad, talleres de cocina, picnics, pisado de la uva o etiquetado de botellas, además de excursiones en bicicleta por los viñedos y en barco por el río Duero.

Quinta da Pacheca, Oporto.

Además, la finca cuenta también con un magnífico restaurante que sirve especialidades locales elaboradas con productos de proximidad y que dirige el chef Carlos Pires, así como la bodega de elaboración, también visitable.

Si alguien prefiere una estancia más tradicional, puede optar por alguna de las 15 habitaciones en la mansión principal, con camas con dosel y una delicada decoración que combina elementos tradicionales y modernos, que incluyen amenities de la firma L’Occitane.

La estancia en las barricas tiene un precio que va desde los 255 euros por noche, 90 en el caso de las habitaciones tradicionales del hotel.

Quinta da Pacheca

a.
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