Oaktree sanea el hotel los ‘saraos’ empresariales en Cataluña

El fondo de inversión Oaktree ha saneado uno de los hoteles catalanes para encuentros empresariales de alto nivel: el Dolce Sitges. El alojamiento, que ahora gestiona Wyndham, se asegura dos años de paz tras entrar en preconcurso de acreedores en 2014.

Ha acogido reuniones de alto nivel, como una reunión del Club Bilderberg en 2010. Después, al Dolce Sitges lo ahogaron las deudas y presentó preconcurso de acreedores en septiembre de 2014. Ahora, según confirman fuentes conocedoras de la situación, el hotel ha ganado dos años de respiro y vuelve a trabajar con proveedores.

Dos han sido los cambios para llegar al nuevo escenario de quietud. Oaktree adquirió el alojamiento de 263 habitaciones a principios de enero. Al hacerlo, el fondo buitre limpió la deuda que Inchydoney Partnership, anterior propietario, había contraído al comprarlo en 2006. Los 61 millones se reflejaban en el pasivo de la entidad: en sus últimas cuentas en el Registro Mercantil, el Dolce Sitges presentaba unas obligaciones de casi 50 millones de euros. 

Por otro, la gestión del establecimiento también sufre cambios. Dolce Hotels fue adquirido a nivel mundial por el grupo norteamericano Wyndham en febrero. La operación, según fuentes conocedoras, dará al menos dos años de respiro al hotel. «Wyndham es fuerte en el segmento de congresos en Estados Unidos. El crecimiento en Europa asegura que no se tomarán acciones drásticas en, al menos, dos ejercicios», abundan las voces. 

Reunión

Hasta ahora, el hotel no ha sufrido cambio alguno, y sus 128 trabajadores conservan sus puestos. Sólo se ha notado una pequeña variación: Dolce trabaja ahora con Panrico. La empresa alimentaria también es propiedad de Oaktree Capital Management.

Las novedades podrían llegar pronto. Un equipo del fondo de inversión pernoctará en el hotel el 17 de marzo. Entonces, habrá reuniones para encaminar el futuro del hotel. La prioridad es, dicen fuentes cercanas, mantener el buen curso del establecimiento, que con la propiedad antigua se había llegado a anotar pérdidas de 1,4 millones (2011) y 1 millón de euros (2012), los dos últimos ejercicios declarados. 

Tras los cambios de propiedad y gestión, el Dolce ha empezado el curso renqueante. El  hotel que viera a la Reina Sofía, Ana Patrícia Botín, Juan Luis Cebrián y Donald Rumsfeld, entre otros, está cerrando un primer trimestre con baja ocupación. No obstante, las previsiones a partir de abril son de mejora substancial y ocupación casi completa.

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