Granada abre las puertas a uno de sus secretos: la Torre Cautiva de la Alhambra
La atalaya es uno de los espacios más destacados de todo el recinto por su decoración interior. Está muy bien conservada pero es muy delicada, por ello las visitas se limitan
Vista desde fuera, la Torre de la Cautiva es una atalaya más del recinto de la Alhambra de Granada. Pero al traspasar sus puertas el visitante se da cuenta de por qué habitualmente está cerrado a cal y canto. Su decoración es tan profusa y delicada que los trabajos de conservación aconsejan limitar las visitas. Pero este enero el Patronato de la Alhambra y el Generalife ha decidido hacer una excepción.
Los turistas que hayan concertado una visita este domingo o el martes, miércoles y jueves de la próxima semana podrán entrar en el torreón donde se piensa que vivió doña Isabel de Solís. Una esclava de origen cristiano que se convirtió al Islam y acabó siendo la favorita del rey Muley Hacén. Con el nombre de Zoraya, estrella del alba, fue una de las reinas de Granada.
La atalaya es una torre-palacio (Qalahurra). La entrada es en recodo y desemboca en un patio con arcos sobre pilares. La estancia principal tiene planta cuadrada con ventanas geminadas al exterior que, a su vez, son pequeñas alcobas. Es allí donde se pueden observar mejor los elementos decorativos de la Alhambra.
El patronato no ha informado si abrirá de nuevo la Torre de la Cautiva en lo que queda de año. El recinto tiene limitadas las visitas diarias para preservar su conservación, por lo que es muy recomendable reservar una entrada con tiempo para poder visitar la Alhambra sin problemas.
