Así se vive y se duerme en la suite más cara del mundo

El artista Damien Hirst decora la suite del Palms Casino Resort de Las Vegas donde cada noche cuesta 100.000 dólares. Si juegas un millón, es gratis.

Ciudad del juego y el exceso por excelencia, Las Vegas demuestra que aún puede sorprender con una escalada de extravagancia. El Palms Casino Resort estrena una nueva suite diseñada por Damien Hirst que redefine el concepto de lujo y donde dormir rodeado de obras de arte cuesta 100.000 dólares la noche.

El artista británico, en colaboración con la firma de arquitectura Bentel & Bentel, y que ya colaboró en la decoración de otros espacios del Palms, como el bar, que muestra uno de sus tiburones disecados, firma la estancia Empathy Suite, que se extiende a lo largo de dos pisos y 836 metros cuadrados y que supone toda una obra de arte en su conjunto, según explicó el vicepresidente y director de Red Rock Resorts, propietario del hotel desde 2106, Lorenzo Fertitta.

En cada uno de los rincones de la suite se respira el diseño y el arte de Hirst a través de seis obras originales del creador, entre las que destacan  esculturas de tiburones disecados y mariposas, dos de su señas

Salón de la suite del Palms Casino Resort. Foto Clint Jenkins.
Salón de la suite del Palms Casino Resort. Foto Clint Jenkins.

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Una suite repleta de arte

Así, en cada uno de los rincones de la suite se respira el diseño y el arte de Hirst a través de seis obras originales del creador, que se ubican, entre otros lugares, en las dos habitaciones principales, equipadas también con camas extragrandes y sala de masajes privada.

Las salas de estar y multimedia pueden acoger hasta a 52 personas, cómodamente sentadas en sofás de cuero italiano y sillas, cojines o apliques también diseñados por Hirst en exclusiva para esta suite

Los dos baños de la suite están realizados en mármol con mariposas de piedra, mientras que las salas de estar y multimedia pueden acoger hasta a 52 personas, cómodamente sentadas en sofás de cuero italiano y sillas, cojines o apliques también diseñados por Hirst en exclusiva para la suite.

El espacio central lo ocupa una gran barra curva con 13 taburetes y decorada con dos grandes esculturas de peces, obra también de Hirst y que lleva por nombre «Here for a Good Time, Not a Long Time».

Bar de la suite del Palms Casino Resort. Foto Clint Jenkins.
Bar de la suite del Palms Casino Resort. Foto Clint Jenkins.

El comedor, con capacidad para ocho personas, ofrece un lugar íntimo y con excelentes vistas a Las Vegas para disfrutar de una cena inolvidable.

Un gimnasio y una sala de juegos dominado por un gran billar que es, en sí, otra pieza artística, completan el interior de la suite

Un gimnasio y una sala de juegos dominado por un gran billar que es, en sí, otra pieza artística, completan el interior de la suite. El balcón, por su parte, está decorado con mosaicos e incrustaciones de mariposas y cuenta con su propio jacuzzi, además de vistas al Strip de Las Vegas.

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El lujo por el lujo

Además de mayordomo las 24 horas, los huéspedes de esta exclusiva suite cuentan con un chófer a su servicio, así como acceso prioritario a eventos del resort, como clubes y teatro, y un crédito de 10.000 dólares (8.830 euros) para gastar en el resto de instalaciones del complejo.

Uno de los dormitorios de la suite del Palms Casino Resort. Foto Clint Jenkins.
Uno de los dormitorios de la suite del Palms Casino Resort. Foto Clint Jenkins.

Aunque no trascendió el coste total de la suite, sí se conoce el precio alcanzado por  algunas piezas individuales firmadas por Hirst en subastas anteriores. Por ejemplo, otra escultura de animales, aunque más pequeña que la de los tiburones que preside la suite, se vendió por 4,4 millones de dólares, mientras que un cuadro similar de mariposas (la suite tiene dos) se vendió por 614.000 dólares en Sotheby’s el año pasado.

Solo las piezas de arte de la suite sobrepasarían los 10 millones de dólares 

Así, una simple suma de las obras grandes, a las que se añade el diseño de mobiliario, azulejos, apliques, cojines, la mesa de billar o los dredones nórdicos, podría alcanzar fácilmente los diez millones de dólares sólo en arte.

Terraza de la suite del Palms Casino Resort. Foto Clint Jenkins.
Terraza de la suite del Palms Casino Resort. Foto Clint Jenkins.

Sin embargo, los dueños del hotel no buscan distraer la atención de sus huéspedes. El arte, señala Hirst, debería “deslumbrar pero no distraer”. Y añadió que le gusta cuando alguien entra en la habitación y dice ‘wow’ puesto que, según su proyecto de suite, el arte debe “dar la bienvenida y luego desaparecer”.

Además de mayordomo las 24 horas, los huéspedes cuentan con un chófer a su servicio, acceso prioritario a eventos del resort, como clubes y teatro, y un crédito de 8.800 euros para gastar en el resto de instalaciones del complejo

Ya se admiten reservas para la habitación, que será gratis para grandes jugadores con una línea de crédito de un millón de dólares o más en el casino. Quienes prefieran pagarlo en efectivo deberán reservar 200.000 dólares para una estancia de dos noches. La mejor experiencia en Las Vegas, sin duda, cuesta dinero.

a.
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