Airbnb activa la diversificación de su negocio en BCN

La tecnológica reduce el peso de barrios como Ciutat Vella en la oferta pese a haber duplicado el número de apartamentos en la zona en apenas dos años.

El alojamiento compartido hace esfuerzos por desmarcarse de los problemas de saturación turística de Barcelona. Mientras se revela contra el mito de ser un foco de turismo de borrachera que carece de retorno para la ciudad, diversifica la oferta para dejar de encasillarse como el típico apartamento de Ciutat Vella.

En términos absolutos, el número de anfitriones de la plataforma ha crecido desde los 4.000 a los 9.200 entre 2013 y 2015. En el barrio, la cifra ha subido desde los 1.240 a los 2.760. Una caída del 1% en términos de repartimiento del pastel pero un incremento de más del doble de inmuebles. En 2016, la cuota descenderá hasta el 25%, ha señalado la dirección de Airbnb.

En el informe presentado, en ningún momento se habla de decrecimiento turístico. Sin embargo, haberse diversificado ayuda a que los huespedes opten por otras partes de la ciudad para poder vivir como un local. Quizás por esta razón, a día de hoy el 64% de los visitantes se aloja fuera de Ciutat Vella. Algo impensable hace pocos años, cuando reunía la zona reunía al 86%.

Retorno para la ciudad

Además, Airbnb se reafirma como un negocio colaborativo en Barcelona. «Los fundadores de Airbnb pusieron su casa en alquiler para obtener unos ingresos adicionales», rememora Arnaldo Muñoz, director de la tecnológica en España y Portugal. Así pues, la firma aporta 740 millones de euros al año al destino catalán. Alrededor de 500 correspondientes al gasto en restaurantes y tiendas y 240 para la remuneración del anfitrión.

La riqueza alcanza a barrios alejados del foco turístico. Pese a reducirse los cálculos, el número absoluto se ha multiplicado al ritmo de la ciudad. «Que estén en nuestra plataforma no significa que no existieran antes», alertan desde la empresa. «Al final, el compartir casa no es algo nuevo, lo que es nuevo es hacerlo mediante una intermediación tecnológica», ha contextualizado Chris Lehane, director global de Asuntos Públicos de Airbnb.

a.
Ahora en portada